La Comunidad aumentará su deuda y recaudará 990 millones menos el próximo año

Después de que este jueves se dieran a conocer las grandes líneas de los presupuestos, el consejero de Hacienda, Antonio Beteta, entregó este viernes las cuentas en la Asamblea de Madrid para su aprobación en pleno, tras su estudio, discusión y enmiendas, el próximo 22 de diciembre previsiblemente. Con el proyecto en la mano ya se puede analizar cuál ha sido la ejecución del presupuesto de 2008 y cómo se gastará el dinero de los madrileños en 2009.

Las cuentas ponen de manifiesto que el Ejecutivo regional "hará uso parcialmente" de los aumentos de deuda autorizados por el Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF), es decir, que se endeudará en 1.927 millones de euros más sobre  los 10.103 millones de deuda acumulados a 31 de diciembre de 2007. Además, recaudará hasta un 5'33% menos que en 2008 (990 millones de euros) en impuestos debido a la crisis. Sin embargo, ambas circunstancias no harán que el Ejecutivo incumpla la Ley de Estabilidad Presupuestaria, ya que todavía se mantendrá dentro de los ratios establecidos.

El agravamiento de la situación económica y la ralentización del consumo están detrás de esta caída en la recaudación que, unida a la necesidad de mantener las inversiones ya realizadas (extensión de la red de Metro, servicios sociales, nuevos hospitales), hace que las nuevas inversiones se congelen y crezcan apenas un 0'3%. Estos tres factores explican además que el presupuesto descienda en términos reales respecto al año pasado pues el crecimiento de las cuentas no llegará al IPC. El recorte será sufrido, sobre todo, por Inmigración, Medio Ambiente, Deportes, Cultura y Justicia e Interior.

Dependencia del IRPF
La caída de los ingresos por impuestos es especialmente significativa para la Comunidad de Madrid, ya que estos suponen un 88% del presupuesto no financiero. En 2009 el descenso será muy notable en los impuestos regionales (transmisiones patrimoniales, actos jurídicos, sucesiones, patrimonio, juego y depósito de residuos), pues permitirán recaudar 1.589 millones menos. También ocurrirá lo mismo con aquellos que gestiona el Estado pero que van a parar directamente a la caja autonómica, como los que pagan determinados medios de transportes (-250 millones) y ventas minoristas de determinados hidrocarburos (-50 millones), de los que en conjunto se ingresará un 40% menos.

Para cuadrar sus cuentas, la Comunidad se aferra a los impuestos compartidos, es decir, aquellos que gestiona el Estado y se reparten entre las comunidades autónomas y que suponen el 73% de sus ingresos totales. A pesar de que la ralentización del consumo hará caer el IVA en más de 800 millones, la Comunidad estima que recibirá del Estado 1.561 millones más que en 2009 por el impuesto sobre la renta (IRPF)

Estas previsiones son vitales para la Comunidad ya que la parte de IVA e IRPF les es entregada mensualmente a las comunidades por el Estado que, al final del año, realiza una liquidación de lo pendiente. Precisamente este año, las finanzas regionales ya se han visto afectadas tras no recibir  418 millones que Madrid esperaban en concepto de adelanto de tesorería y que el Ministerio de Hacienda no entregó con el argumento de que los resultados económicos no estaban siendo los previstos y, por tanto, incluso se había entregado ya más de lo correspondiente.

Aguirre ha sido "cigarra en tiempos de bonanza"
Para el PSOE, Esperanza Aguirre, ha sido "cigarra" en tiempos de bonanza económica y que esto supone un "problema añadido" al de la crisis económica para hacer los Presupuestos. Maru Menéndez, portavoz del grupo socialista en la Asamblea, "no se ha aprovechado los ejercicios de bonanza económica para mantener una inversión productiva y generar servicios públicos de la mayor calidad". Por ello, la cuentas de 2009 "no podrán aprovecharse como palanca en la lucha contra la crisis y en favor del empleo".

La portavoz de IU, Inés Sabanés, recalca que los Presupuestos "van justo en dirección contraria a la que deberían ir", ya que Sanidad y Educación "no crecen prácticamente nada" y Aguirre "no rectifica su política fiscal y aumenta la presión sobre las personas que viven de su salario, con menos ayudas sociales y una previsible subida del transporte".