Olano -que fue el primero de los 27 procesados en declarar ante la sala- aseveró que el tribunal de la Audiencia Nacional se encuentra "a miles de kilómetros de la imparcialidad". "La sentencia contra nosotros está escrita y esta instrucción se ha hecho mediante el impulso político: no espero justicia ni aquí ni ahora", dijo.
El acusado añadió que a pesar de su renuncia permanecerá presente en la sala para atender a aquello que se le pueda reclamar o solicitar pero concretó que no quiere "participar más" en lo que considera "una farsa".
Negociación y diálogo
Olano, que se limitó a contestar a las preguntas de su abogada, Ainoa Baglieto, aprovechó su declaración, realizada íntegramente en euskera, para pedir "negociación y diálogo" como medio de alcanzar una solución para "Euskal Herria". "Por la vía de la represión no hay solución, es necesario respetar la voluntad de Euskal Herria mediante la negociación y el diálogo", dijo.
Olano admitió además haber actuado como "cara visible" de Gestoras Pro Amnistía para "denunciar la represión, la tortura de los detenidos y trabajar en la defensa de los derechos humanos de los presos de ETA".
El dirigente de Gestoras utilizó las respuestas a su letrada para desarrollar un extenso discurso político en el que incluyó la denuncia de las condiciones de encarcelamiento de los presos de la banda terrorista, el rechazo a la conocida como 'doctrina Parot' -"que impide la puesta en libertad cuando ya se ha cumplido la pena", dijo"- o la crítica hacia las fuerzas de seguridad del Estado.
"El Estado debería garantizar los derechos de los encarcelados", dijo por ejemplo y defendió que el papel de Gestoras y sus integrantes se limita a actuar como "testigos" para "hacer llegar a la sociedad toda esa realidad".
Olano reconoció también que ha trabajado con "deportados" motivo por el cual se ha desplazado a países extranjeros como Cabo Verde donde se ha reunido con representantes de partidos políticos y organismos internacionales.
En cuanto a la policía, Olano acusó a los integrantes de las Fuerzas de Seguridad del Estado de acudir al País Vasco
"para hacer la guerra". "Se trata de una policía de ocupación", añadió.