Comercios y taxis tendrán un 'botón antiatracos'

El acuerdo de seguridad supondrá que la Policía Local prestará "especial atención" a polígonos industriales y zonas comerciales, en los que se podrá colocar cámaras de vigilancia. Estas también se instalarán en el interior de los establecimientos, que podrán tener "botón de seguridad" conectado al 112 o al futuro Centro de Coordinación de Operativa.

Puesto que las Bescam (Brigadas de Seguridad Ciudadana de la Comunidad) no tienen competencias para cumplir estas labores y el ejecutivo regional carece de jurisdicción sobre la Policía Nacional, la Comunidad se acogerá a la posibilidad de "mancomunar" policías de distintos municipios para destinarlos a estas áreas.

Las consejerías de Interior y Economía estudiarán además líneas de subvención específicas para los gremios más castigados por los asaltos, como son los joyeros y los peleteros, e instarán a la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) y a la Delegación de Gobierno a que se sumen al plan.

Mayor dureza legal
Tras una reunión para estudiar las distintas posibilidades, el consejero de Interior, Francisco Granados, reclamó la reforma de Ley de Enjuiciamiento Criminal que pene la reincidencia, así como que se refuerza "la autoridad de la Policía" frente a posibles denuncias de los delincuentes.

Al respecto, Arturo Fernández, presidente de CEIM, aseguró que la instalación de mafias en la capital responde a que existe "mayor permisividad en España" que en otro países. "Hay delincuentes que ingresan en la cárcel y a los seis meses salen fuero. Eso es un caldo de cultivo y por eso pedimos que si endurezca la ley", sentenció.

Por último, respecto a los 1.700 agentes que deberían haber llegado a Madrid en enero, Granados reprochó al Ministerio que "no es relevante cuantos vienen, ya que en cuanto tienen oportunidad se van porque tienen el mismo salario que en el resto de España, pero aquí el coste de la vida es mayor".