El presidente del Gobierno en funciones y del PP, Mariano Rajoy, ha condenado este martes los atentados terroristas perpetrados esta mañana en el aeropuerto de Zaventem y en la estación de metro de Maelbeek, en Bruselas, que se han cobrado la vida de al menos 30 personas y han dejado 170 heridos. Al respecto, ha manifestado que "hoy es un día triste para los seres humanos decentes", así como que "España no va a regatear ningún esfuerzo" contra la lucha el terrorismo yihadista, a la par que ha agradecido "la lealtad" de todos los grupos políticos.
En un acto en el Ayuntamiento de Ayamonte (Huelva), donde ha realizado esta declaración institucional, Rajoy ha destacado que "la lucha contra el terrorismo, que es muy difícil, nos exige a todos perseverancia, dedicación, colaboración, fuera y dentro de España, e inteligencia", y ha insistido en que España "no va a regatear ningún esfuerzo en esta labor".
Del mismo modo, ha remarcado que estos hechos "no tienen justificación ninguna" y ha agradecido "la responsabilidad y lealtad" de los distintos grupos políticos", a lo que ha añadido que el Gobierno se compromete, "ya lo ha hecho", y está teniendo lugar una reunión en el Ministerio del Interior, a mantener puntualmente informados de los acontecimientos.
A su vez, ha agradecido "la disposición" de todos los grupos para mantener "el principio de la humanidad de los demócratas para luchar y ser eficaces contra el terrorismo".
Rajoy ha recordado que ha tenido la oportunidad de hablar esta misma mañana con el primer ministro belga, Charles Michel, para trasladarle su "repulsa y pesar y el de todos los españoles" por los atentados, y asegura que se ha puesto a su disposición para "ayudarle en todo aquello que necesite".
Mariano Rajoy, acompañado por el presidente del PP andaluz, Juanma Moreno, y por la ministra de Empleo y Seguridad Social en funciones, Fátima Báñez, y otros representantes políticos, ha comenzado la declaración destacando "el sentimiento y el dolor del Gobierno y de todas las personas de bien" por estos hechos y ha mostrado sus condolencias a familiares y allegados de todas las personas asesinadas, deseando a su vez la pronta recuperación de los heridos.
En esta línea, ha expresado "toda la solidaridad de España" con los vecinos de Bruselas, que "han sido golpeados por la barbarie y por el fanatismo, del que nadie está a salvo" porque "son ataques indiscriminados y brutales. Hoy ha sido Bruselas y en otras ocasiones Londres, París, Madrid y tantos lugares del mundo".
Rajoy ha lamentado que el terrorismo es "una amenaza global contra la civilización, la libertad y contra los derechos humanos, y lo es en cualquier parte del mundo" y ha continuado diciendo que "no hay religión que ampare semejante fanatismo criminal" y, de hecho, ha subrayado el presidente en funciones, "la mayor parte de las víctimas del yihadismo son personas musulmanas en todo el mundo".
LUCHAR "CONJUNTAMENTE"
Por todo ello, ha instado a luchar "conjuntamente" contra el terrorismo yihadista. "España, que ha sufrido el golpe del terrorismo, quiere mostrar su solidaridad y apoyo a todos los hermanos belgas. Ellos saben que nos tienen a su lado y pueden contar con toda la colaboración de nuestro país para localizar y poner a disposición de la justicia a los asesinos", ha enfatizado Rajoy.
Tras asegurar que España "venía colaborando con Bruselas desde el pasado", ha mostrado su disponibilidad para hacerlo con "mayor intensidad si cabe. Nuestra solidaridad con el pueblo belga es plena, total y absoluta", ha remarcado.
LABOR DE LAS FUERZAS Y CUERPOS DE SEGURIDAD
A su vez, ha agradecido su labor "discreta, constante y eficaz para proteger a los ciudadanos" a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y a las Fuerzas de Inteligencia de España y, aunque ha precisado que "la seguridad absoluta es un concepto que no existe", ha subrayado que éstos han demostrado "su eficacia y trabajan para defender nuestra libertad y nuestra vida".
Por último, ha lamentado que esta visita a la localidad ayamontina haya coincidido con este acontecimiento "tan triste", pero ha insistido en que ha sido "un honor" dejar su firma en el libro del Consistorio, con todo su "afecto y cariño". Posteriormente, Rajoy se ha trasladado a la Iglesia de San Francisco del municipio.
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