Un devastador incendio destruye la planta de Campofrío en Burgos y pone en peligro un millar de empleos

Un devastador incendio aún no extinguido, pero sí controlado, declarado en la factoría de Campofrío en la capital burgalesa ha destruido por completo sus instalaciones, ubicadas en el Polígono Industrial de Villafría, y ha obligado a evacuar a cerca de cuatrocientos vecinos de los barrios más próximos a dicha área industrial por el peligro que suponía la densa humareda originada por el fuego.   
El fuego se originó sobre las 06.40 horas en la zona de cocidos, sin que hubiera que lamentar trabajadores heridos relacionados directamente con el grave siniestro, si bien desde el primer momento se encendieron las señales de alarma ante la posibilidad de que entraran igualmente en combustión los depósitos de amoníaco existentes en la factoría.   

Pocas horas después, sobre las 09.00 horas, el alcalde de Burgos, Javier Lacalle, optó por activar el Plan de Emergencia Municipal (PEMBU) y, ante la gran humareda generada, visible desde cualquier punto de la capital, lanzó la recomendación de que trabajadores del polígono y vecinos de los barrios más próximos, sobre todo los de Capiscol, Villafría y Cótar, mantuvieran las ventanas de sus centros de trabajo y viviendas cerradas para evitar posibles intoxicaciones.   

Además de cortar al tráfico la ronda BU-30 de Burgos y las principales conexiones con la zona cero del siniestro, a fin de facilitar la intervención de los equipos de emergencia, la densidad del humo obligó finalmente a evacuar por precaución a cerca de cuatrocientos vecinos de Villafría y Cótar, ciento cuarenta de los cuales fueron atendidos en el Polideportivo Municipal burgalés Talamillo por el personal de Servicios Sociales.   

Aunque no ha habido que lamentar desgracias personales entre la plantilla de trabajadores de la factoría, se da la circunstancia de que cuatro personas han resultado heridas a primera hora de la mañana en un accidente de tráfico registrado en la ronda BU-30 de Burgos y relacionado con el incendio, fruto del choque entre dos turismos.

Vuelta a casa

El Ayuntamiento de Burgos dio luz verde ya por la tarde para que los cerca de cuatrocientos vecinos evacuados de los barrios de Villafría y Cótar puedan retornar a sus hogares tras haber constatado que no existe riesgo intoxicación por el humo desencadenado.   

El vicealcalde de Burgos, Ángel Ibáñez,  ha explicado que la autorización para volver a sus casas a los vecinos, que se encontraban alojados en el Polideportivo Municipal José Luis Talamillo, se justifica en que se han cumplido las dos premisas básicas, el control, que no extinción total, de las llamas en la factoría por parte de los bomberos y la constatación de que los niveles  de emisiones en la zona dan valores normales.   

En cualquier caso, el Plan de Emergencia Municipal (PEMBU) sigue activado, a la espera de cómo evoluciona la situación, y el Ayuntamiento ha acordado además convocar para este lunes la celebración de un pleno con el fin de aprobar una declaración institucional de apoyo a Campofrío.   

El vicealcalde y el alcalde, Javier Lacalle, han mantenido además esta tarde un encuentro con representantes de los trabajadores en la Casa de Cultura del barrio de Gamonal a fin de trasladarles igualmente el máximo apoyo de la institución local.   

A esta hora, por tanto, los vecinos evacuados retornan a sus hogares, para lo que el Ayuntamiento ha dispuesto autobuses para aquellos que carezcan de vehículo propio.   

A lo largo de la tarde han quedado abiertos todos los viarios adyacentes que habían sido cortados, excepto el tramo de la carretera BU 30 entre la N-1 y la N-120 que separa la factoría incendiada y el aeropuerto de Burgos.   

Durante toda la noche permanecerán en la factoría personal de los servicios de extinción de incendios ayudados por los equipos electrógenos suministrados por el Ejército, continuando sus trabajos hasta la total desaparición de los rescoldos. También se seguirán efectuando labores de medición de la calidad del aire durante toda la noche.

La empresa se compromete con Burgos   

La propia empresa, además de agradecer la solidaridad y la ayuda prestada por los servicios de emergencia, expresaba horas después públicamente compromiso de invertir en Burgos para recuperar la capacidad productiva "lo antes posible".   

Campofrío Food Group, a falta de una evaluación concreta de las consecuencias, reconoce que los efectos sobre las instalaciones de la fábrica son "considerables", ante lo cual ha tomado las medidas necesarias para garantizar el suministro de sus productos al mercado a través de sus otras fábricas, tanto en España como en otros países del grupo.   

Además, Campofrío lanzaba un mensaje de "tranquilidad" a sus empleados, con cuyos representantes ha mantenido reuniones para explicarles la situación, así como a clientes, proveedores y consumidores y agradecía el apoyo y la solidaridad recibida del Ayuntamiento de Burgos, la Junta de Castilla y León, la Delegación de Gobierno y otras instituciones y ciudadanos burgaleses.   

El mensaje de la multinacional ha sido acogido con cierto alivio por el millar de empleados dependientes de la factoría burgalesa y otras tantas familias que dependen indirectamente de ella.

Reunión de la Junta con el comité de empresa   

La propia consejera de Agricultura y Ganadería de la Junta de Castilla y León, Silvia Clemente, además de calificar de auténtica "tragedia" la destrucción de la planta, comprometía ya el apoyo del Ejecutivo regional para que la empresa pueda recuperarse.   

La máxima responsable del sector agroalimentario en la Comunidad explicaba que nada más tener conocimiento del siniestro tanto ella como el presidente de la Junta, el burgalés Juan Vicente Herrera, se pusieron en contacto telefónico con el presidente de la empresa, Pedro Ballvé, a fin de expresarle su solidaridad y brindarle el apoyo de la Administración regional.   

"Le hemos dado todo el apoyo para que Campofrío pueda recuperar su producción, y será ellos los que diseñen cómo hacerlo", ha incidido la consejera, quien ha anunciado igualmente su propósito de reunirse este mismo lunes en la sede de su departamento, en Valladolid, con el Comité de Empresa con el propósito de hacer extensivo a sus integrantes el respaldo absoluto de la Junta. Al encuentro asistirá igualmente el consejero de Economía y Empleo, Tomás Villanueva.   

Clemente recordaba además que Campofrío es una marca española, una de las más importantes con implantación en Castilla y León, y ensalzaba que es "una de las que mejor muestra el potencial de esta Comunidad en materia cárnica, pues esta región es la tercera, por dedetráse Cataluña y Aragón, en censo de porcino y con un sector primario muy potente ligado a él".   

También desde Zaragoza, escenario del Consejo Político Federal del PSOE, el secretario general, Pedro Sánchez, y el líder de dicha formación en Castilla y León, el burgalés Luis Tudanca, se solidarizaban con los afectados por el incendio y se mostraban confiados, en palabras del primero, en que los casi 2.000 empleados recuperen sus empleos "lo antes posible".   

En este sentido, Tudanca hizo un llamamiento a las distintas administraciones, provincial, autonómica y nacional, con el fin de que se comprometan a "garantizar el futuro" de Campofrío, deseo compartido igualmente por el líder de IU en la Comunidad, José María González.

La planta de Campofrío en Burgos fue inaugurada en 1997 por el Rey Juan Carlos, tras una inversión de 60 millones de euros, aunque en 2006 la multinacional volvió a realizar mejoras en las instalaciones con un coste de algo más de cinco millones de euros.

La planta tiene una capacidad productiva de aproximadamente 100.000 toneladas al año y sus líneas de producción están completamente robotizadas, tanto en el proceso de embutido como en el de envasado y empaquetado.

Es una de las más avanzadas en la fabricación de embutidos curados, jamón, productos cocidos y loncheados, que, posteriormente, se distribuyen en más de cuarenta países; y desde 2003 cuenta con la homologación para exportar sus productos.