Agricultura espera abonar hasta el final de año 100 millones más del Programa de Desarrollo Rural tras llegar al 83% de ejecución con el último pago

La Junta de Castilla y León espera abonar antes de final de año 100 millones más correspondientes a los fondos del Programa de Desarrollo Rural (PDR) correspondiente al periodo 2007-2013 tras haber alcanzado con el último pago de 62,5 millones un grado de ejecución del 83 por ciento.   

Así lo ha anunciado este jueves después de la reunión del Consejo de Gobierno la titular de la cartera de Agricultura y Ganadería, Silvia Clemente, quien ha añadido que con este grado de ejecución se ha abonado ya un total de 1.504 millones de euros.  

Clemente ha detallado que tanto Castilla y León como la Unión Europea han garantizado su aportación para culminar los pagos, a la espera de que el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente (Magrama) cumpla con su compromiso de realizar las modificaciones presupuestarias que permitan completar con 117 millones de euros los fondos ministeriales necesarios para llevarlo a cabo.   

En este sentido, la consejera de Agricultura y Ganadería ha subrayado que este extremo "depende de una de las partes", en este caso el Ministerio, el cual "tiene que poner esos fondos", por lo que ha admitido que no puede "confirmar" dicha aportación, a pesar de asegurar la correspondiente a la comunidad autónoma y a la Comisión Europea.   

Al hilo de esto ha subrayado que Castilla y León es "la primera comunidad autónoma" en cuanto a mayor ejecución del PDR y ha ensalzado la disposición y coordinación de medios de la Junta que han permitido, a su juicio, el pago inmediato de los fondos una vez llegó la partida ministerial el pasado 12 de agosto, del cual se beneficiaron 7.411 agricultores y ganaderos.

Ejecución en plazo   

Respecto a los plazos de ejecución de este programa, la consejera ha destacado el cumplimiento de la conocida como regla 'n+2' de la Comisión, que da un margen de dos años para poder ejecutar los presupuestos consignados y, por lo tanto, para pagar los expedientes. Con la aplicación de esta regla, Silvia Clemente ha subrayado que "no se han perdido los fondos europeos, ya que el plazo concluye el 31 de diciembre de 2015.   

En términos de cumplimiento de objetivos, ha destacado que a través de esta financiación ha sido posible "incorporar jóvenes al sector, mejorar la rentabilidad de las explotaciones y modernizar regadíos". En concreto, el Programa de Desarrollo Rural ha permitido la incorporación de 3.038 jóvenes a la actividad agraria, lo que convierte a Castilla y León en la comunidad autónoma que más ha incorporado en el periodo 2007-2013; el fomento en 7.191 explotaciones agrícolas y ganaderas de inversiones dirigidas a la mejora de su competitividad, e impulsar los reagadíos mediante la modernización de 53.000 nuevas hectáreas, a las que se suman en estos momentos actuaciones en otras 5.000 hectáreas.   

En la financiación de este programa participan tres administraciones, la Unión Europea aporta un 50 por ciento a través del Fondo Europeo Agrario de Desarrollo Rural (Feader), y el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente y la Junta de Castilla y León aportan el 50 restante.   

Hasta el momento, la aportación de Feader al Programa ha sido de 671,4 millones de euros, la aportación de la Administración General del Estado asciende a 402,8 millones de euros y la de la Junta de Castilla y León a 430,5 millones de euros.

Veto ruso

Por otra parte, Silvia Clemente ha asegurado que la incidencia del veto ruso a los productos agrarios de la Unión Europea será "mínima" en las exportaciones de Castilla y León, por lo que ha enviado un mensaje de tranquilidad.   

Clemente ha detallado que Rusia ocupa el décimo quinto puesto en cuanto a los principales compradores de productos de la Comunidad, ya que de los 1.477 millones de euros que alcanzaron las exportaciones agroalimentarias de Castilla y León, sólo 15 correspondían al mercado ruso.   

Asimismo, ha recordado que ya en 2013 la Comunidad hubo de hacer frente a un veto ruso, en este caso a los productos porcinos, lo que sí supuso "una bajada importante".   

Por ello, Castilla y León cuenta con "destinos mucho más importantes" para sus productos en los que "ha avanzado mucho", de manera que ha confirmado que en el Ejecutivo autonómico no existe "especial preocupación" al respecto.