Menos de un 10 por ciento del fósforo del Lago de Sanabria procede de los vertidos, según un estudio de la CHD

Un reciente estudio realizado por la Confederación Hidrográfica del Duero (CHD) ha certificado que "ni el 10 por ciento" del total del fósforo detectado en el Lago de Sanabria, el principal elemento contaminante, "aunque no el único", del embalse zamorano, procede de los vertidos a este pantano.   

Así lo ha adelantado el presidente de la Confederación Hidrográfica del Duero (CHD), José Valín, quien ha precisado que se trata de las "conclusiones preliminares" de un estudio del Organismo de cuenca sobre el estado del agua del Lago de Sanabria que concluyó a finales del mes de febrero.  
 "Tal y como yo esperaba el fósforo procedente de los vertidos no llega ni al 10 por ciento del total, lo cual no quiere decir que no haya que mejorar todo lo mejorable los vertidos", ha manifestado Valín, quien, en una entrevista a la agencia Europa Press con motivo del Día Mundial del Agua que hoy se celebra, ha considerado que se trata de un "dato importante" que permite avalar el "buen estado" de este espacio natural.   

En concreto, este estudio realizado por la CHD se ha centrado en analizar qué porcentaje del fósforo, el principal nutriente del embalse, procede de los vertidos y qué porcentaje procede de la Cuenca del Duero de forma natural.   

En este sentido, ha aprovechado la ocasión para explicar que el Lago de Sanabria ha estado afectado en los últimos años por varios incendios forestales que han podido aumentar la aportación del fósforo, una circunstancia que aporta un "tremendo volumen" de este elemento químico, según ha admitido, y que no se ha tenido en cuenta.   

"Sí es que es verdad que el embalse ha estado sometido en años inmediatamente anteriores a una serie de problemáticas que muchas veces no se tienen demasiado en cuenta y que son ciertos incendios forestales que afectan mucho a la aportación de fósforo a la Cuenca", ha precisado Valín, para quien se trata de un tema que "falta por estudiar".   

Según ha defendido el presidente de la CHD, desde el punto de vista de la evaluación como estado ecológico y en argot técnico la calidad del agua del Lago de Sanabria es en función de los años entre "buena" y "muy buena", el primero o el segundo de los cinco niveles establecidos para este concepto.   

Respecto a otro parámetro técnico que tiene en cuenta el fósforo y otras circunstancias, el Lago de Sanabria estaría catalogado como "oligomesotrófico", el segundo en una escala de siete estados posibles donde el mejor sería el "oligotrófico" y el último "muy elutrófico".   

Finalmente, ha descartado opinar sobre la motivación que la llevado a la Estación Biológica Internacional (EBI) para denunciar la contaminación del Lago de Sabria, un hecho que ha vuelto a rechazar con rotundidad desde el reconocimiento no obstante de que "todo es mejorable".