Aprobado en las Cortes regionales el Decreto con los votos a favor del PP
Silván ofrece participación para enriquecer en trámite parlamentario las 22 medidas urgentes en vivienda
Los socialistas aseguran que la iniciativa de la Junta es "un escaparate sin un solo euro"
miércoles 28 de agosto de 2013, 13:33h
El consejero de Fomento, Antonio Silván, ha
hecho un llamamiento a la participación de los grupos políticos y de los
colectivos afectados en materia de vivienda para enriquecer en trámite
parlamentario las 22 medidas "urgentes" propuestas por la Junta a través
de un Decreto-Ley que ha sido convalidado este miércoles en las Cortes y
que se tramitará como Proyecto de Ley --este último aspecto ha recibido
el apoyo unánime de la Cámara--.
Silván he hecho especial hincapié en la decisión de tramitar estas
nuevas medidas como Proyecto de Ley para que en el trámite
parlamentario se enriquezcan con las aportaciones de los grupos y de los
sectores implicados de modo que las soluciones que se apliquen en
Castilla y León en materia de vivienda sean resultado del consenso y del
acuerdo "necesario siempre" y más, ha recordado, en este contexto de
crisis económica con situaciones "dramáticas" para algunas personas.
El titular de Fomento ha definido estas 22 medidas "urgentes" en
materia de vivienda que fueron aprobadas en el Consejo de Gobierno de la
Junta del pasado 31 de julio como "necesarias", "prácticas" y
"realistas" y como "una respuesta global y activa" de la Comunidad
Autónoma al derecho a una vivienda digna y adecuada, máxime ante las
situaciones de especial dificultad sobrevenida para nuevos grupos
sociales que precisan de un mayor apoyo al acceso a la vivienda, como
los deudores hipotecarios a los que se ha abierto un procedimiento de
ejecución hipotecaria.
Desde el Grupo Parlamentario Socialista, que ha votado en contra
de la convalidación, la procuradora Ana Muñoz de la Peña ha cargado
contra un Decreto-Ley "de escaparate" y "con medidas de escaparate" que,
según ha augurado, no tendrá efectos inmediatos ya que carece de una
memoria económica que las respalde.
"Nadie se cree estas medidas", ha asegurado De la Peña, que ha
cuestionado la convalidación de un Decreto-Ley que, según ha advertido,
es una "auténtica estafa electoral" que desmantela, además, el régimen
jurídico de la vivienda pública en Castilla y León "refugiado en la
urgencia para no contar con nadie".
De la Peña ha acusado a la Junta de Castilla y León de seguir la
senda del Estado con una "demostrada sumisión" en materia de vivienda
cuando podría haber redactado una nueva Ley de Vivienda o desarrollado
la actual. "Ni lo uno ni lo otro", ha lamentado la procuradora
socialista, para quien las 22 medidas propuestas por el Ejecutivo no
resuelven los verdaderos problemas de la sociedad castellanoleonesa en
materia de vivienda y "sólo quieren acallar el clamor social".
"No son creíbles"
La procuradora socialista ha ido más allá en sus críticas hacia
unas medidas que "no son creíbles" y cuyo mayor interés es la
recaudación. "No tienen credibilidad, no dan confianza a los mercados ni
seguridad a las familias o a los promotores; sólo pretenden aparentar
que se hace algo con 22 medidas sin un sólo euro que las respalde", ha
sentenciado. "Cien viviendas para 12.000 desahuciados, ¿esto es una
broma?", se ha preguntado.
Por su parte, el procurador 'popular' Daniel Sobrados, que ha
anunciado una dotación de 200 millones de euros, ha rechazado las
críticas socialistas y ha recordado que las demandas del principal grupo
en la oposición responden a planes y medidas que ya se han puesto en
marcha en los últimos años, frente al modelo andaluz "con una presidenta
de estreno", ha apostillado, que proponen los socialistas y que "no son
más que propaganda".
Al igual que el consejero, el procurador del PP ha llamado a los
grupos Socialista y Mixto a dejar los reproches a un lado para trabajar
en el enriquecimiento de unas medidas "reales y concretas" que podrían
ser "más y mejores", con la particularidad de que mientras se consensúan
ya se pueden estar aplicando las 22 propuestas "urgentes" de la Junta.
Por parte del Grupo Mixto, que también se ha mostrado en contra de
la fórmula del Decreto-Ley "por razones de forma y de fondo", su
viceportavoz y procurador por UPL, Alejandro Valderas, ha reclamado un
pronunciamiento de los ayuntamientos de Valladolid y de León por ser los
más afectados por unas medidas cuyos números "no casan".
Valderas ha cuestionado también que no se hayan incluido
propuestas como las realizadas por el Consejo Económico y Social
(CES) y ha expresado su preocupación ante una "sospechosa" finalidad
política y electoral por parte de la Junta con plazos de dos años que
coinciden con la conclusión del actual mandato, a lo que ha sumado la
capacidad recaudatoria de la norma sin contemplar "inversión alguna".
Las medidas
Entre las medidas urgentes en materia de viviendas destaca una
rebaja de un 20 por ciento de los precios máximos de venta o alquiler de
aquellas viviendas públicas que se adjudiquen después de que entre en
vigor esta norma. El precio actual de las viviendas cuyas futuras
adjudicaciones sufrirán esta rebaja es de 500 euros en régimen de
alquiler y de 100.000 euros en venta.
Otra de las acciones se centra en facilitar los pagos de las
cuotas de compra o de alquiler con determinadas moratorias de pago,
además se avanza en la amortización anticipada de la compra o en la
adquisición de viviendas en arrendamiento. También se reservará una
parte de las viviendas para colectivos en riesgo de exclusión social y
se obliga a la Administración autonómica y a los ayuntamientos de más de
20.000 habitantes a constituir parques públicos de alquiler social,
integrados por viviendas y alojamientos protegidos de titularidad
pública, que se destinarán preferentemente al alojamiento, en régimen de
arrendamiento, a personas incluidas en los colectivos de especial
protección.
Junta y ayuntamientos deberán reservar al menos el 30 por ciento
de las viviendas protegidas desocupadas y de los terrenos de uso
residencial de su titularidad o de entidades dependientes para
consolidar los parques públicos de alquiler social.
Dentro de las acciones destinadas a movilizar el 'stock' de
viviendas destaca la ampliación del periodo de amortización de préstamos
hipotecarios, además no se exigirá la devolución de las ayudas de la
Junta por compra de vivienda cuando esta sea objeto de transmisión por
subasta, dación en pago o adjudicación en un procedimiento de desahucio
ni cuando se modifiquen los préstamos para reestructurar la deuda
hipotecaria.
Asimismo, la política de alquiler de la Junta se unifica en un
único Programa de Fomento del Alquiler que pretende dotar de "mayor"
flexibilidad el apartado de requisitos de las viviendas del programa así
como el relacionado con los arrendatarios.
La Junta establece una "más clara" diferenciación entre las
viviendas de promoción privada y las de promoción pública. En el caso de
las viviendas protegidas privadas se reduce la duración del régimen
legal de protección a 15 años y a 10 años el plazo mínimo para solicitar
la descalificación. En la vivienda protegida de promoción pública se
mantiene el plazo de protección en 30 años y se concentra en la atención
a los sectores sociales desfavorecidos con ingresos hasta 3,5 IPREM, a
los que el mercado no proporciona una solución a sus necesidades.
Además se flexibilizan los requisitos para acceder a una vivienda
protegida. Se estable un nivel máximo de ingresos de 6,5 veces el IPREM
en la promoción privada y la posibilidad de que personas jurídicas
públicas y privadas sin ánimo de lucro sean destinatarias de viviendas
protegidas cuando en las mismas se vayan a desarrollar actividades de
interés público o social o se destinen a realojar personas incluidas en
alguno de los colectivos de especial protección.