Sabremos la verdad

El sábado pasado, hacia la una y veinte del medio día, el Presidente del Gobierno y líder del Partido Popular, Mariano Rajoy permitió que los medios de comunicación social, acudiesen a la sede del partido, enlazasen sus terminales a una señal de audio y video, y que los españoles pudiésemos asistir a una declaración solemne sobre, según el, las infamias que se estaban difundiendo a cerca de la financiación de su partido y de las presuntas entregas de dinero negro al propio Presidente del Gobierno.

Antes de su declaración, solemne, enérgica y muy medida, y durante toda la semana anterior, un día si y otro también, los periódicos, las radios, las televisiones y las redes sociales, habían hecho públicos, los papeles del tesorero y gerente del PP, Luis Bárcenas, en los que implicaba a toda la cúpula del PP, actual y anterior, en el cobro de sobresueldos, regalos, viajes, prebendas y beneficios varios.

Mariano Rajoy fue categórico y negó hasta tres veces que personas de su partido o el mismo, hayan recibido sobresueldos o hayan obtenido ingresos irregulares.

El problema del Presidente, al margen de su culpabilidad personal o no, que ya se verá, es que preside un partido incontrolable, como como consecuencia del enorme poder que acumula un pequeño grupo de dirigentes que han hecho de su capa un sayo y que se han rendido al oropel y a los atractivos de una vida muy por encima de sus honestas posibilidades e incluso muy por encima  de sus necesidades y a la que en política, solo  se tiene acceso mediante practicas, digamos heterodoxas, desde el poder.

El problema del Partido Popular es que este escandalo de presunta financiación irregular, sobresueldos, trajes regalados, cumpleaños y viajes gratis, surge en un momento muy crítico para el resto de ciudadanos, que han visto que el partido político que aprieta sus cinturones económicos hasta el ultimo botón, se reparte, según todos los indicios, dineros recibidos de no se sabe donde y tampoco  se sabe porqué lo recibe o a cambio de que.

El problema del PSOE, la otra gran fuerza política del momento, es que ya nadie le cree, ni a su líder, ni a sus dirigentes. Hace tres días que han hundido a este país en la miseria, que se han repartido subvenciones falsas y que ahora quieren levantarse impúdicamente como una alternativa limpia y honesta. No son creíbles.

Aquí, ahora, en España, ya nadie cree nada. Tenemos que ver para creer, tocar para saber que es cierto lo que vemos, y lo que es peor, aunque veamos y toquemos, seguimos desconfiando y creyendo que nos siguen engañando.
 
Nosotros, desde "Sociedad Civil y Democracia", poco podemos hacer hoy, para devolver la confianza a la gente. Pero aquello que podamos hacer para que la sociedad, los ciudadanos españoles, conozcan lo que se ha cocido dentro del sistema en estos últimos años, lo vamos a hacer y por eso, esta misma semana del mes de Febrero de 2013, como partido político, nos vamos a personar en los Juzgados de Madrid, donde se sustancian las causas de Gürtel y de las Cajas de Ahorros y pediremos papeles, solicitaremos pruebas y comparecencias de todos y cada uno de los implicados en los procedimientos. Y ustedes, ciudadanos de a pie, conocerán día a día, todo aquello que llegue a nuestras manos y así puedan decidir luego, libremente si todo esto que van sabiendo, nos lo merecemos.

Daniel Movilla