Los empresarios de CyL aprueban la gestión del Gobierno de Herrera

Los empresarios de Castilla y León mantienen, tras más de cinco años de crisis económica, el aprobado a la gestión del Gobierno regional, liderado por Juan Vicente Herrera, aunque con la nota más baja (5,1) desde la elaboración del primer sondeo en 2001 al registrar una caída de tres décimas en 2012.

Así se contempla en el sondeo empresarial publicado por Castilla y León Económica que muestra cómo desde el año 2006 la nota otorgada a la labor del Ejecutivo autonómico ha ido descendiendo progresivamente desde los seis puntos obtenidos en aquel año, según el sondeo publicado en el número de enero de la revista Castilla y León Económica y basado en una encuesta realizada a 200 empresarios y ejecutivos de las nuevas provincias.

Según la encuesta de Castilla y León Económica, la clase empresarial se muestra más crítica con la actividad de las consejerías de Economía y Empleo y Hacienda, a las que suspende: el departamento de Tomás Villanueva obtiene 4,7 puntos, con lo que por segunda vez en tres años vuelve a estar por debajo del aprobado, tal como ocurrió en 2010.

Por su parte, la Consejería liderada por Pilar del Olmo registra un suspenso por primera vez en la historia del sondeo al ser puntuada con un 4,6, con un desplome de seis décimas.

La función de la oposición también es muy cuestionada al obtener la peor nota (3,4) desde la publicación del sondeo en el año 2001 y sigue la tendencia a la baja iniciada hace cuatro años, según refleja el sondeo elaborado por Madison MK para Castilla y León Económica.

Las empresas más admiradas

El Grupo Antolín es la empresa cuya evolución más admiran los empresarios de Castilla y León, según el 14,5 por ciento de ellos, seguido del Grupo Siro (10,5 por ciento), Grupo Leche Pascual (cuatro por ciento), Renault España (3,5 por ciento), Galletas Gullón (2,5 por ciento), Campofrío y Grupo Norte, ambos con el dos por ciento.

Respecto a la empresa familiar mejor valorada, en primer lugar aparece el Grupo Siro, destacada por el seis por ciento de los encuestados, seguida del Grupo Antolín (5,5 por ciento), Grupo Leche Pascual (5,5 por ciento), Galletas Gullón (tres por ciento) y Helios (2,5 por ciento).

El año que acaba de concluir ha sido "pésimo" para las empresas de la Comunidad ya que el 62 por ciento afirma que redujeron sus ventas, siendo el porcentaje más elevado desde 2001, y sólo el 13 por ciento las aumentaron, que es el dato más bajo de los últimos doce años.

Por contra, el 24,5 por ciento de los empresarios afirma que su facturación fue similar a la del pasado ejercicio, según el sondeo publicado por Castilla y León Económica.

Respecto a los mercados exteriores, el 26 por ciento de los empresarios encuestados aseguró realiza exportaciones, y de éstos, el 57,7 por ciento afirma que aumentaron en el año 2012 -diez puntos por encima del anterior sondeo-, mientras que se mantuvieron estancadas en el 30,8 por ciento de los casos y se redujeron en el 11,5 por ciento de las empresas exportadoras.

En cuanto a los beneficios, el 60 por ciento asegura que se redujeron en 2012 mientras que aumentaron en el 14 por ciento de los casos y se mantuvieron estables para el 25 por ciento de las empresas.

Con una caída generalizada de ventas y plusvalías, las empresas tuvieron que hacer ajustes en sus plantillas en 2012, tal como refleja el sondeo; así, el 51,5 por ciento de los empresarios indica que recortó el número de trabajadores, es decir, más de la mitad de las empresas de Castilla y León, sólo aumentó el personal en el ocho por ciento de los negocios y otro 40 por ciento mantuvo estable el volumen de empleados.

Inversiones

Las inversiones también se han visto perjudicadas en la actual coyuntura económica, pues descendieron en el 44 por ciento de las empresas durante el pasado ejercicio, fueron estables en el 36 por ciento de los casos y otro 16,5 por ciento de directivos afirma que aumentaron.

Preguntados sobre las principales medidas para salir de la crisis, los empresarios señalan en primer lugar conseguir una mayor financiación (12,1 por ciento) y a continuación destacan reducir el número de políticos (10,3 por ciento), disminuir el gasto público (10,1 por ciento), generar más empleo (7,8 por ciento), reorganizar las administraciones y empresas públicas (6,7 por ciento), fomentar las inversiones (6,3 por ciento), incentivar el consumo (4,5 por ciento) y reducir los funcionarios (4,3 por ciento).