El presidente de la patronal vallisoletana teme la presencia de "falanges sindicales" que fuercen el cierre del centro de la ciudad

El presidente de la Confederación Vallisoletana de Empresarios (CVE), Manuel Soler, ha manifestado su temor de que en la jornada de Huelga General convocada para este miércoles, 14 de noviembre, se encuentre en el centro de la ciudad la presencia de "falanges sindicales" que obliguen a los pequeños comerciantes a cerrar sus tiendas.

En declaraciones recogidas por Europa Press tras la presentación de la III Semana de las Redes Sociales de Castilla y León, Soler ha reiterado que todos los españoles pueden tener "motivos de descontento", pero ha defendido que la huelga "no es lo que va a solucionar el problema".

El representante de la patronal ha señalado que los sindicatos "siempre han ido a cerrar los polígonos", pero sin embargo este año asegura que los propios trabajadores "les han dicho que ni aparezcan por allí". Por ello, considera que se ha planteado la movilización como una huelga de consumo.

Este hecho hace que considere que la huelga se plantea principalmente "contra los autónomos", por que la intención de "cerrar los centros de los ciudades" con la presencia de "falanges sindicales" este miércoles perjudicará directamente a las pequeñas y medianas empresas y al comercio. "Se va contra algo necesario", ha recalcado.

Por otra parte, ha recordado que los propios sindicatos han utilizado la reforma laboral que además les ha permitido "sobrevivir a dos de ellos" con la posibilidad de recurrir a expedientes de regulación que facilitan el despido con 20 días de indemnización por año trabajado. "De no ser así habrían tenido que cerrar sus puertas", ha insistido.

De hecho, ha agradecido esa posibilidad porque cree que se necesitan "sindicatos creíbles" para, por ejemplo, alcanzar pactos laborales como el que se firmará mañana en Renault España y que puede facilitar la adjudicación de un nuevo Plan Industrial.