Tres de cada cuatro autónomos no esperan mejorar facturación este año y el 90% no prevé contrataciones

Tres de cada cuatro autónomos de Castilla y León (el 74,6 por ciento) se muestra más pesimista y no confía en un crecimiento de su facturación este año, mientras que el 90 por ciento además no prevé contratar trabajadores en lo que resta de ejercicio, según se desprende del Observatorio del Trabajo Autónomo de la Federación de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA) elaborado en el mes de septiembre.

La presidenta de la organización en Castilla y León, Soraya Mayo, ha presentado este informe, en el que se refleja un crecimiento del pesimismo entre los autónomos, el cual "se sustenta en cifras" que reflejan que tres de cada cuatro (78,2 por ciento) manifiestan que la actividad económica de su negocio es negativa y, de estos, más de la mitad (53,6 por ciento) asegura que la caída ha sido de más de un 21 por ciento.  Por su parte, un 12,2 por ciento de los autónomos aseguran que la actual situación no les ha perjudicado y un 9,6 que afirma que su balance ha sido positivo.

Entre las causas de esta situación, el 62,3 por ciento considera que la caída de las ventas y la pérdida de actividad son las principales causas de "derrumbe" de su negocio, mientras que la morosidad pública y privada (18,1 por ciento) y falta de acceso al crédito en las entidades financieras (12,5 por ciento) conforman las otras causas que han repercutido negativamente en sus negocios.

La mala situación económica lleva a un "pésimo dato", según Mayo, quien ha destacado el hecho de que el 90 por ciento de los autónomos no tiene previsto contratar a trabajadores, pero además las expectativas caen a la mitad, ya que sólo un 7,9 por ciento considera necesario ampliar plantilla, mientras que en el barómetro del mes de mayo era del doble (13,7 por ciento) y registra las cifras de los que se mostraban dispuestos a contratar en los baremos de septiembre de 2011. Esto se suma a que el 84,5 por ciento de los autónomos manifiesta que no ha contratado trabajador alguno en el primer semestre de este año.


Entre las causas que motivan que no se tenga previsto contratar a trabajadores, la principal para casi la mitad de estos empresarios (47,3 por ciento) es la caída de la actividad, mientras que un 21,7 por ciento afirma estar pasando por dificultades económicas. El 15,8 por ciento no contrata por llevar a cabo reducciones de plantilla y un 10,7 por ciento no precisa trabajadores para su actividad.


Por otro lado, según el barómetro, los autónomos no esperan buenas noticias este año y un 66,8 por ciento considera que la situación irá a peor, mientras que un 28,9 por ciento cree que se mantendrá sin cambios y sólo un 1,5 por ciento ve posibles mejoras.


De esta forma, casi el 50 por ciento de los autónomos cree que su negocio va a ver mermadas sus expectativas, el 39,3 por ciento que se mantendrá igual y sólo un 7,7 por ciento que mejorará.
MALESTAR CON EL SISTEMA FINANCIERO

En cuanto a los problemas de los empresarios autónomos, Soraya Mayo ha reiterado el malestar con el sistema financiero, que supone uno de sus principales problemas y además permanece desde hace tiempo.


El barómetro refleja que un 62,3 por ciento de los autónomos tienen necesidades de financiación, pero al mismo tiempo se constata que el 66,2 por ciento de ellos no se han dirigido a las entidades financieras para solicitar liquidez "porque están hartos de que les tomen el pelo".


Mayo ha concretado que la mayoría de los autónomos necesita hasta 8.000 o 10.000 euros para su negocio, pero se les pide todo tipo de avales, papeles y vinculación con la entidad financiera a través de tarjetas de crédito, planes de pensiones o seguros, por ejemplo. A todo eso se suma que el préstamo para estos empresarios es un 31 por ciento más caro que para las grandes.


La presidenta de ATA ha señalado que están "hartos" y ha advertido a las entidades financieras de que se equivocan si piensan que van a lograr una fidelización de los clientes con una vinculación "tan extrema", ya que se consigue el "efecto contrario" y, una vez se haya pagado, se irán de la misma.


Mayo ha comparado a las entidades financieras con Merkel y su relación con España y ha asegurado que por mucho que se de el rescate al país no se va a "querer más" a los alemanes, lo mismo que los autónomos a las entidades.


Ante esta situación, Soraya Mayo ha asegurado que los autónomos sobreviven porque "tiran" de recursos propios, tanto amigos como familiares, con préstamos "caseros" porque no pueden pagar el doble del dinero que piden, pero ha alertado de que esto pone compromete y además pone en peligro a estas personas que les prestan el dinero, en la mayoría de los casos destinado a ganar liquidez.


En cuanto al 33 por ciento que se dirige a las entidades financieras a pedir un crédito, al 38,4 por ciento les ha denegado la financiación, mientras que a un 23,1 por ciento se les ha concedido una cantidad inferior a la que se solicitó y un 38,5 por ciento no ha tenido dificultad.


Por lo que se refiere a la morosidad, casi el 60 por ciento de los autónomos se ve directa o indirectamente afectado por la morosidad pública o privada (el 57,1 por ciento).
RETRASO EN LOS PAGOS

En este sentido, Soraya Mayo ha asegurado que España también en este caso es "diferente" pero "para mal" porque actualmente no se cumplen los plazos marcados para los pagos, algo que se ha "llevado por delante" a más de 200.000 empresas del país.


Sin embargo, ha advertido de que a partir de marzo de 2013 la Unión Europea velará por el cumplimiento de estos plazos, que además se reducirán, y se podrá sancionar a las administraciones públicas, a lo que se añadirán las demandas de ATA, que "irá a por todas".


En cuanto al retraso en el cobro, Soraya Mayo ha advertido de que sólo el 13 por ciento de los autónomos cobra en plazo, y el resto cuando puede, un 31,1 por ciento de los cuales lo hace en más de 361 días.


En cuanto a las medidas del Gobierno, el Plan de Pago a Proveedores es una de las más valoradas, con un 16,5 por ciento de afectados por el mismo, el 35,3 por ciento de los cuales ha evitado el cese de su actividad. Sin embargo, la presidenta de ATA ha advertido de que las administraciones públicas siguen acumulando retrasos y deuda.


Por otro lado, en lo que se refiere al aumento del IVA, es la medida menos valorada, con un 87,4 por ciento de los autónomos que se muestra en desacuerdo con esta medida. Además, un 43 por ciento no lo ha repercutido en sus productos, aunque muchos lo harán a partir de enero.


Otra de las medidas del Gobierno que los empresarios autónomos ven también como "negativa" es el aumento del IRPF, una de las medidas "peores" para el colectivo por los efectos que va a tener, ya que es igual para los que cobran 6.000 que para los que obtienen 18.000.


Frente a ello, sí se ve con buenos ojos la reforma laboral o la reducción de cotizaciones a las nuevas altas de familiares colaboradores, pero además lo que más se valoraría serían las medidas de estímulo para la economía que "no llegan" y reactivarían la economía.