Reflexiones del campo para el próximo debate

Voy cerrando la cosecha en mis parcelas, lamentando el poco grano y su escaso peso, pero casi dando gracias porque conozco mi trabajo y sé que a un año malo como éste le seguirán otros mejores. Esa esperanza en el futuro, nacida de la experiencia, que tengo yo como tuvieron mis padres y mis abuelos, es la que ahora echo en falta escuchando a políticos, expertos y, lo que es peor, a los ciudadanos de mi país, aplastados por el miedo y el desánimo.

Con la losa de la crisis llega un nuevo Debate sobre el Estado de la Región, o de lo que queda de ella, porque en el último año los problemas han sido de tal envergadura que parece que se nos han olvidado un poco los límites autonómicos, porque ¿quién reclama ahora las competencias del Duero? Poco hay que envidiar a Juan Vicente Herrera, con el papelón de justificar que las cuentas no cuadran y encima sin que esté ZP para echarle la culpa, y probado que los problemas económicos no son sólo de "otras" comunidades autónomas, sino de la nuestra, porque cuando echa la bronca Rajoy y pide ajustes "ya", Castilla y León también está en la lista.

Por si sus señorías, entre la montaña de recortes,  tienen a bien de mencionar al campo en el debate de las Cortes, les contaré que la situación de crisis actual se suma a las dificultades propias del sector, a la economía de supervivencia de los ganaderos, a la mala cosecha que recogen los agricultores, a la pérdida por la subida del IVA -una media de 1.200 euros al año para el agricultor profesional -, todo ello salpicado por los brutales descensos del presupuesto agrario y también por la incertidumbre en torno a la reforma de la PAC, todavía sin saber si en Bruselas tienen claro qué es la agricultura y ganadería profesional.

Ahora que todo el mundo pide, el campo de Castilla y León ofrece. Ofrece a la región una alternativa de empleo y trabajo, producción y dinamismo. En el campo tenemos callo y experiencia en superar malas cosechas, caídas de precios y crisis alimentarias, vivimos con los pies en el suelo y ni nos creímos los fantasmas del pasado -cuando en otros sectores se querían hacer ricos a base de pelotazos- ni nos creemos los fantasmas actuales, que quieren resignarnos al pesimismo . Hay que afrontar los problemas, paso a paso, sin dar por perdida ninguna batalla.

Sr. Herrera, en el campo con poco nos arreglamos. Ojo, no tan poco como lo que nos han traído estos tardíos presupuestos de 2012, que nos han machacado vivos. Pero con unos pequeños incrementos de las partidas que van directamente a la producción, a los agricultores y ganaderos profesionales, podemos sacar adelante al sector primario, y con él, al tejido rural de esta región. Y también le pido, presidente, como al resto de los políticos, que si no puede dar a esta región dinero, por lo menos den ejemplo. Ejemplo de fe en nuestra gente y en nuestra tierra, y también ejemplo de sacrificio: no puede ser que aquí los que arruinaron el país sigan agarrados a sus prebendas y se pida el esfuerzo a todos los demás.

Donaciano Dujo. Presidente de ASAJA de Castilla y León