El presidente de Carbunión asegura que no cerrará las minas, pero el Gobierno está "asfixiando" a las empresas

El presidente de la patronal del carbón Carbunión y propietario de las explotaciones mineras del Grupo Alonso, Victorino Alonso, aseguró este lunes en Ponferrada (León) que no tiene intención alguna de cerrar las explotaciones mineras, aún cuando el Gobierno central no está cumpliendo con lo pactado en cuanto a los incentivos al sector y ello está "asfixiando" a las empresas.

Alonso dijo que tendrá que ser el Gobierno de Mariano Rajoy el que cierre las minas. "Nosotros no vamos a cerrar, nosotros no vamos a hacer EREs ni despidos, porque no vamos a jugar a no funcionar para que ya desaparezca la actividad", resaltó Alonso tras reunirse con los sindicatos mineros y con el secretario regional del PSOE en Castilla y León, Julio Villarrubia, informa Ep.

Victorino Alonso avanzó que aplicará "una política de emergencia y economía de supervivencia". Es este sentido señaló que "las compras y suministros las pagaremos, como es la energía y los explosivos; paralizaremos el resto de las compras, y luego, en función de la bajada de ayudas, tendremos que pagar los demás costes para no cerrar, es decir, ligar las ayudas a los salarios y a vivir lo más que se pueda, pero para morirse; pero nosotros no despediremos ni cerraremos y los despidos los tendrá que hacer quien cierre, y si cierra el Gobierno, que los haga el Gobierno".

El presidente de Carbunión terminó la frase con ironía: "Tendremos que acudir a Obama, porque nuestro presidente tiene bastantes problemas".

Victorino Alonso resaltó que "la situación es muy grave", porque según dijo, "el Gobierno está utilizando la técnica de decir espera que te pago un poco, no te lo pago y te lo entrego al mes siguiente".

Según el empresario minero los bancos huyen "pavorosamente" de las explotaciones mineras y un acreedor, incluso de una cantidad mínima como de 50 euros, podría instar el embargo de cualquiera de ellas.

"Los bancos hace años que no descuentan nada, pero los últimos quince días escapan de la minería; ahora mismo es liquidez cero y cinco meses sin cobrar las ayudas, te viene la letra de la máquina, de la póliza de crédito y eso quiere decir que si nosotros paramos nos arruinamos más rápido todavía, porque nos viene la hipoteca y eso hay que pagarlo, porque sino hay suspensión de pagos y tendrá que haber convenio de acreedores y el primero de ellos que vaya al juzgado te ejecuta, y se puede dar la paradoja que por cincuenta euros te pueden embargar la empresa", reflexiona el industrial minero.

Victorino Alonso añade que la situación económica no sólo afectaría al plano de la minería, sino que entiende que, una vez que se cierre el sector y se liquide, se acabarán también las ayudas a las infraestructuras, formación y prejubilaciones. "Si ahora cierran las minas, no habrá dinero para nada, ni para becas, porque muerto el perro se acabo la rabia -sintetiza Victorino Alonso-; es decir, se pueden hacer infraestructuras dentro de un año o más, pero como cierre la minería todo el contexto del Plan del Carbón se acabó, con ellas las prejubilaciones, las inversiones, la reactivación económica, infraestructuras; todo se acabaría".

Los empresarios no descartan demandar por la vía judicial al Gobierno central por los incumplimientos con el Plan del Carbón, pero el propio presidente de la patronal carbonera entiende que cobrar lo adeudado por esta vía sería imposible o vendría ya muy tarde. "El plan de cierre tampoco cuesta nada, porque si no se paga: es decir, las ayudas a la minería actuales son 300 millones de euros anuales, pero si no se pagan, si no tienes dinero, ¿Qué pasa, embargas al Estado?; Y no veo yo en esto futuro, puesto que igual para el 2027 lo cobraríamos, aunque no sé quien", ha dudado Alonso.