La prudencia en las carreteras o el prudente de Silván

Si hay políticos  con los que resulta especialmente difícil conseguir una declaración medianamente comprometida ese es el consejero de Fomento y Medio Ambiente, Antonio Silván. Y como no es cuestión de perder ciertas costumbres, el responsable de las carreteras (sólo de las autonómicas) no ha querido pronunciarse sobre una de las noticias de las últimas jornadas: la posibilidad de que el Gobierno apruebe, probablemente el próximo viernes, el cobro de peajes por el uso de las autovías. Ni blanco ni negro, sino todo lo contrario. "Hay que ser prudentes", dijo el consejero. ¿Prudentes cuando se circula por las carreteras, en la forma de adoptar las medidas de "ajuste", o en lo que se dice? A saber. Prudentes, en cualquier caso. Sin embargo, sea como fuere, la Junta, con toda su prudencia, también tendrá algo que decir, aunque sólo sea porque nos atraviesan las principales autovías de España y porque tenemos dos de titularidad autonómica: la León-Burgos y la Valladolid-Segovia, aunque esta última ya tiene un "peaje en sombra", si bien no lo pagan directamente los usuarios. No obstante,  a tenor del número de conductores que las frecuentan, sus "tasas" tampoco darán para mucho.