Álvarez reclama un mayor protagonismo de las sociedades de garantía recíproca para salir de la crisis

El presidente de Iberaval, José Rolando Álvarez, ha defendido la labor de las sociedades de garantía recíproca (SGR), para salir de la crisis, ya que "son parte de la solución" a la falta de crédito de las entidades financieras. Álvarez ha presentado los resultados de 2011 de Iberaval, que ha calificado de "esperanzadores y positivos", y ha reclamado un mayor protagonismo para las SGR ya que, a pesar de la restructuración del sistema financiero, "las pymes seguirán sin créditos porque no cumplen las exigencias de las entidades", un vacío que pueden llenar estas sociedades. "Hay que poner sobre la mesa políticas que ayuden a la financiación y eso pasa también por apoyar un sistema de garantías suficiente", ha señalado.

En este sentido ha apuntado  que resulta imprescindible reforzar el papel de CERSA, la empresa pública que reavala las operaciones de las SGR, sobre todo porque cada euro aportado por ella se multiplica hasta 37 veces en el crédito a pymes y autónomos.

También el consejero de Economía y Empleo, Tomás Villanueva, presente en la presentación del Informe Anual, ha apostado por esta colaboración público-privada, de la que Iberaval es fiel exponente y que se materializa en las diferentes líneas de ayudas que llegan desde la Administración regional.

En cuanto a los resultados de la Sociedad de Garantía Recíproca de Castilla y León, José Rolando Álvarez ha destacado el incremento de un millar de nuevos socios, hasta alcanzar los 18.222. Otro dato significativo es el riesgo vivo de la SGR, que asciende a 568 millones de euros y representa el diez por ciento de todo el sector.
Los recursos propios también crecieron el pasado año hasta los 76 millones de euros, un cinco por ciento más, lo que se traduce en un coeficiente de solvencia del 12,4 por ciento, más de cuatro puntos por encima de lo que exige el Banco de España a las entidades financieras.

El presidente de Iberaval también se ha referido al ratio de morosidad, que se sitúa en el tres por ciento, muy por debajo de la media nacional, un dato que demuestra que "la morosidad no es un problemas para las pymes, que no son las culpables de la morosidad del sistema financiero". Durante 2011, el número de operaciones formalizadas por Iberaval descendió un tres por ciento y asciende a 137 millones de euros. En la actualidad Iberaval apoya la financiación de más de 5.000 pequeñas empresas y autónomos y contribuyen al mantenimiento de 86.000 empleos.

El perfil de quienes  trabajan con Iberava corresponde micropymes y autónomos que realizan operaciones por una media de 98.000 euros. La gran diferencia de la sociedad de garantía recíproca de Castilla y León con respecto a las entidades financieras es su plazo de devolución que, en el caso de las primeras, está en los ocho años de media.