Buenas intenciones para tan poco dinero

No da para más. Ya se han dado a conocer al detalle los Presupuestos Generales del Estado y su aplicación a la Comunidad y, como era de esperar, todos son recortes, especialmente en materia de inversiones que descienden de forma considerable.

"El presupuesto llega donde llega" ha dicho tajante Cristóbal Montoro al presentar unas cuentas que al menos recogen viejas aspiraciones de Castilla y León en materia de infraestructuras que, de esta forma, vuelven a estar sobre el papel, véase la autovía del Duero, la León-Valladolid, o la finiquitada por el Gobierno de Zapatero en plena ejecución, Burgos-Aguilar.

En materia alta velocidad,  continuará la ejecución de las obras del AVE hacia el noroeste, pasando por Castilla y León, es decir, de Valladolid a Burgos, Palencia, León y Zamora, y también se vuelve a hablar, parece que más en serio, de la conexión con Galicia a través de Ponferrada, de manera que la capital del Bierzo también tendría AVE, aunque muy a largo plazo. Muy buenas intenciones y poco más, porque si habitualmente el Presupuesto no es más que una hoja de ruta a la que se aplica toda clase de modificaciones , en un año en el que los recursos cada vez son más limitados pensar en gastar en algo que no sean servicios esenciales parece toda una quimera.