Para el jefe de gabinete Arroyo Salgado "no ha parado de meter medidas que dilatan la causa"

 
El jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, dijo  que la ex mujer del fiscal Alberto Nisman, la jueza federal de San Isidro Sandra Arroyo Salgado, "no ha parado de meter medidas que solamente dilatan la causa" judicial y consideró "extraño" que el fallecido funcionario judicial no haya contratado seguros de vida si "llegó a pedirle un arma a (Diego) Lagomarsino".
 
 
 
A su vez Aníbal Fernández,  calificó de "sensatas y coherentes" las declaraciones del presidente de la Corte Suprema de justicia de la Nación, Ricardo Lorenzetti,  quien sostuvo ayer que "es momento en el que hay que tomarse definiciones concretas", en relación a la investigación sobre la muerte del fiscal Alberto Nisman.
 
 
Advirtió, además, que  Sandra Arroyo Salgado, querellante en la causa  "no ha parado de poner trabas" por lo cual "claramente está buscando sacar la causa del Juzgado de Instrucción",  "encontrar un punto que diera pie a decir que fue homicidio", con lo cual podría "reclamarle al Estado sumas siderales".
 
Las expresiones sobre el tema  por parte del titular de la Corte Suprema de Justicia, Ricardo Lorenzetti,  "son más que sensatas y coherentes", afirmó  hoy al ser consultado sobre el tema, al ingresar a la casa de Gobierno.
 
 
"Una exigiendo que se resuelva", dijo y recordó que  Arroyo Salgado, ex esposa de Nisman, "había pedido la  recusación de la fiscal (Viviana) Fein, que había sido rechazada por (Fabiana) Palmaghini;   ha apelado esta decisión con lo cual vuelve a pone otra traba igual que la traba que había puesto respecto del conocimiento ocular del hecho y de la investigación que se viene llevando desde el punto de vista criminalístico. No ha parado de poner trabas permanentes en esta situación donde ella claramente lo que está buscando es sacar la causa del Juzgado de Instrucción que solamente investiga  la causa de muerte del fiscal Nisman;  90 días ya pasaron, con lo cual mire si tendrá razón el presidente de la Corte", expresó Aníbal Fernández.
 
"Arroyo Salgado -agregó el Jefe de Gabinete-  está permanentemente poniendo trabas y  no permite que se siga avanzando en este tema; no vimos reconstrucción de los hechos; ella se vale de la expresión de los peritos de parte, contratados por ella, que solamente han hecho un informe; no han visto el cadáver, han trabajado con fotos y videos, lo dicen ellos mismos. Están llenos de elementos extraños que sirven para justificar los dichos de la Dra. Arroyo Salgado que nada tiene que ver con causa", dijo.
 
El Jefe de Gabinete reiteró que Arroyo Salgado "no ha parado de meter medidas que solo dilatan las posibilidades de la determinación de cuál ha sido la verdadera causa de la muerte del fiscal Nisman; es porque, a mi juicio, lo que está buscando es encontrar en algún punto que el Juzgado de Instrucción que investiga la causa de la muerte del fiscal Nisman diera un pie para decir que tiene que ver con el homicidio porque, volvemos al tema de los seguros: dicen  que no hay seguros que beneficien a terceros;  extraño es que el fiscal Nisman, sintiéndose amenazado no haya tenido seguro de vida; extraño es que le pida a Lagomarsino que le dé un  arma parta protegerse eventualmente pero no haya pedido un seguro de vida, o no haya contratado uno; lo extraño de todo esto que, pareciera ser entonces, la única figura que calza es la del homicidio porque  permitiría endilgando al Estado la falta de deber de servicio de custodia, reclamarle sumas siderales, con lo cual parecería ser que este es el tema y que por eso está moviéndose en esos términos, esas cosas nos exime de las tareas que cotidianamente estamos observando lleva a la práctica Arroyo Salgado".
 
Aníbal Fernández agregó que también "son satisfactorias" las declaraciones de Lorenzetti respecto del titular del Tribunal Federal Nro 2, que es el que tiene el juicio por encumbramiento de AMIA. "Venían quejándose de un montón de tareas; lo que le ha dicho el presidente de la Corte es ¿por qué no prueban con trabajar?; si empezaba por trabajar las cosas se hacían más fáciles y en todo caso si había temas -por contratos o cosas por el estilo-,  la Corte no tenia por costumbre discutir públicamente, lo importante es seguir avanzando con la investigación  y no comportarse como si fuese una pelea de vecinos. Fue muy gráfico", acotó.