El PP, preso de Bárcenas libre
viernes 23 de enero de 2015, 11:18h
Ni siquiera había salido aún de la cárcel y ya estaba Luis
Bárcenas retando al que fue su partido, el Popular, para que, si se atreven, le
demanden por mentir sobre la existencia de dinero 'B' en la sede de Génova. He
oído de todo en las últimas horas: que si hay un pacto secreto entre los
'populares' y el ex tesorero, que si hubo presiones a la Audiencia para la
excarcelación, que si... Nervios y muchos bulos, es lo que hay en un país en el
que ya no creemos, y me parece que hacemos mal, ni en la honradez de la clase
política, ni en las instituciones.
Pienso, en primer lugar, que Bárcenas tenía que salir ya de
la cárcel. Demasiado larga esa prisión provisional de la que tanto abusan
algunos jueces. Una fianza de doscientos mil euros no justifica un
encarcelamiento de año y medio, y conste que mi simpatía por el chulesco y
presuntamente delincuente Luis Bárcenas es perfectamente descriptible: ninguna.
Pero el PP, con Bárcenas libre, tiene un problema. El ex
tesorero tiene, por decirlo al castizo modo, más peligro que un mono con una
metralleta. Puede que inicialmente refrene sus ansias de vendetta, pero nadie
puede garantizar, a estas alturas, que no acabe 'cantando' cualquier día en el
que se siente frente a una cámara de televisión. Y lo verdaderamente malo para
algunos en el PP es que saben que Bárcenas sabe que ellos saben todo lo que él
sabe. Toda una pesadilla -y no porque sea él personalmente quien debe andar más
preocupado-- para Mariano Rajoy, que sigue aparentando tranquilidad y hay que
reconocer que lo hace de una manera eficaz: cree que no citando las cuestiones
candentes por su nombre y apellidos, los fantasmas se alejan. De hecho, me
parece que, salvo error u omisión por mi parte, la primera vez que pronunció la
palabra 'Podemos' para referirse a un partido político fue en la última sesión
de control parlamentario, el pasado miércoles. Se ignora cuándo articulará las
palabras 'Luis Bárcenas'.
En un programa de televisión, 24 horas, me pidieron un
titular periodístico. Era la última noche de Bárcenas en prisión. Titulé
"el PP, preso de Bárcenas libre". Lo repito hoy, cuando el ex recluso
lleva unas horas en libertad. Ignoro qué ocurrirá, pero seguro que no será
bueno para el partido gobernante y para su deficiente estrategia de
comunicación, cuando faltan, hoy, exactamente cuatro meses para la jornada de
reflexión ante las elecciones del próximo 24 de mayo. Menuda papeleta, nunca
mejor -o peor-dicho.