La pastera sigue interfiriendo en la relación bilateral
Uruguay insiste en que ganaría cualquier juicio por UPM en La Haya
miércoles 18 de junio de 2014, 15:34h
Uruguay volvió a insistir en que le asiste la razón legal en
el caso de la autorización que dio para el aumento de producción de la papelera
UPM y que ganaría cualquier juicio por el tema que Argentina quiera imponerle
ante la Corte Superior de Justicia de La Haya (CIJ).
En declaraciones a la emisora Radio Sarandí de Montevideo,
el canciller Luis Almagro, único portavoz del Gobierno uruguayo en este tema,
señaló que su país "hizo todo" lo que se requería para autorizar la
mayor producción de la polémica planta papelera, incluidas las consultas con
Argentina.
"Lo hicimos todo. Nos re curamos en salud, de presentar
las cosas adecuadamente por lo que yo creo que el tema se debería terminar
acá", dijo el canciller.
En ese sentido, apuntó que lo mejor es "no ir a La
Haya", aunque de todas formas la CIJ sin duda validaría "el aumento
de la producción".
Asimismo, Almagro negó que su gobierno reciba presiones de
la empresa UPM, de capital finlandés, tal y como dice Argentina, y que por el
contrario Uruguay "ha puesto mucha presión sobre la empresa para
regularizar temas ambientales".
"Hemos estado con el ojo arriba, no se aumentó toda la
producción de una. Se re chequeó que se estuviera cumpliendo con lo exigido.
Esa ha sido la lógica", añadió.
Ayer mismo Almagro ya insistió en esta tesis en otra
entrevista en la que advirtió que a su país le asiste "el derecho y la
razón" en este caso y que su país tomó "las decisiones correctas".
Uruguay autorizó la semana pasada un incremento en la
producción de 100.000 toneladas en la planta papelera de UPM, ubicada sobre el
fronterizo río Uruguay y fuente de polémica bilateral desde su construcción en
2005.
Ese anuncio provocó la reacción Argentina, que anunció que
denunciaría de forma inmediata a Uruguay ante la CIJ por este tema y que
revisaría toda relación bilateral, al considerar la decisión de Montevideo como
un gesto "inamistoso".
El canciller argentino Héctor Timerman llegó incluso a decir
que ya "se agotaron todas las posibilidades de seguir negociando" con
Uruguay por este asunto.
La instalación de la planta de UPM, ubicada en la localidad
de Fray Bentos frente a la argentina Gualeguaychú, fue motivo del peor
conflicto en décadas entre ambos países por el bloqueo que ambientalistas
argentinos mantuvieron durante varios años en el puente fronterizo.
Por este enfrentamiento, Argentina recurrió en 2006 al
tribunal de La Haya, que en 2010 determinó que la planta no contaminaba, pero
que Uruguay no había informado debidamente a su vecino sobre los detalles de la
construcción.
El fallo ordenó, además, crear una comisión conjunta para
vigilar y controlar la contaminación en el entorno de UPM.