Familiares de desaparecidos ya tienen su edificio en la ex ESMA

La puesta en valor del edificio, de 3.200 metros cuadrados, fue posible gracias al trabajo conjunto de la Defensoría del Pueblo de la Ciudad de Buenos Aires, el Ministerio de Desarrollo Social de la Nación, a través del Plan Argentina Trabaja, y la Facultad de Arquitectura de la UBA, que mostraron los resultados en un encuentro en la sede de la Defensoría, en la calle Piedras.
 
"Armar este proyecto con una misma energía de diferentes procedencias nos permite hoy ver sus frutos, en tan poco tiempo", dijo la defensora del Pueblo, Alicia Pierini, respecto al trabajo realizado en el edificio de la ex Esma, que comenzó en el 2010 con la firma de un acuerdo, y concluyó en 2013.
 
Por su parte, Lita Boitano, titular de Familiares de Detenidos y Desaparecidos, organización que nació en septiembre de 1976, destacó la satisfacción de la Asociación por poder contar con un predio donde realizar diferentes actividades culturales y agradeció a "todos los que participaron" en el proyecto.
 
El rector electo de la Facultad de Arquitectura y Urbanismo, Luis Bruni, reflexionó sobre "el tiempo que requiere reconstruir el tejido social" que la dictadura rompió, y manifestó el compromiso de su casa de estudios con este tipo de emprendimientos.
 
En tanto, el arquitecto Angel Casinelli, que estuvo presente en el día a día del proceso de puesta en valor del edificio en representación de la Defensoría, relató desde la pantalla de un video como fue el trabajo, y mostró su resultado.
 
Luego, de cara a la audiencia, Casinelli destacó el crecimiento conjunto de todos los que participaron en este proyecto, desde los integrantes de la Cooperativa Pachakuty, del Plan Argentina Trabaja, hasta los profesionales de la UBA, y dijo: "Ninguno de nosotros es el mismo después de estos dos años, fue una experiencia transformadora".
 
Recordó además que el edificio de la Esma fue construido en 1928, que por allí pasaron 5.000 personas privadas de su libertad y que en el 2004 el ex presidente Néstor Kirchner lo recuperó para constituirlo en Espacio para la Memoria.
 
Casinelli explicó que durante los casi tres años que duró el trabajo se capacitó a los cooperativistas en diferentes tareas de herrería, plomería, micropisos, pintura, albañilería y carpintería.
 
Juan, uno de los cooperativistas que trabajó en el edificio, destacó que "durante los dos años de trabajo" tuvieron "la posibilidad de aprender oficios", y adelantó que en los próximos años estos oficios pasarán a ser su medio de vida.
 
También estuvieron presentes en el evento el actual rector de la Facultad de Arquitectura de la UBA, Eduardo Cafide; una treintena de integrantes de la cooperativa Pachakuty; Graciela Lois, familiar e integrante de la Defensoría; y representantes del Centro de Estudios Sociales y Legales (Cels).