Ante el Senado
Lorenzino y Kicillof ratificaron que el país pagará su deuda y criticaron a "quienes quieren volver al pasado"
miércoles 28 de agosto de 2013, 13:38h
El ministro de Economía y el secretario de Política
Económica ratificaron en el Senado que el proyecto que propone una nueva
reapertura del canje de deuda es una muestra de que "Argentina no eludirá
sus compromisos de pago con sus acreedores".
En un plenario de comisiones en el Senado, Hernán Lorenzino
aseguró que existe un "intento de volver al pasado", y advirtió que
algunos acreedores "no tienen deseo genuino de cobrar, sino que lo que
quieren es tener ganancias cuantiosas a costa de todos los argentinos".
El ministro recalcó que la Argentina "ha cumplido con
su compromiso de deuda y lo va a seguir haciendo", y afirmó que "el
fallo de la Cámara de Nueva York pretende traer incertidumbre sobre la voluntad
y la capacidad de pago de la Argentina".
"No nos van a llevar a un escenario como el de
2001", enfatizó el funcionario, y
consideró que ese fallo "nos recuerda que ese pasado en términos de
politica financiera y de desendeudamiento está más cerca de lo que pretenden
algunos".
Afirmó que la nueva propuesta de canje de deuda "no es
un intento de evadir a la justicia de EEUU de ninguna manera", sino que
"es una propuesta concreta que demuestra que la Argentina no sólo tiene
voluntad de pago, sino que además mantiene esa voluntad de pago".
Confirmó además que el 12 de septiembre próximo la Argentina
"va a hacer frente al pago final de Bonar 7", por un monto de 2.070
millones de dólares.
Indicó que "la deuda en moneda extranjera con el sector
privado representa menos del 10 por ciento del PBI", e insistió con que
"la deuda con el sector privado en moneda extranjera, que es la medida más
clara de la situación de deuda de un país, va a estar por debajo del 8,5 por
ciento en terminos de PBI".
"Los argentinos,
desde hace diez años, venimos pagando nuestra deuda e hicimos un esfuerzo en no
descuidar todas las obligaciones sin descuidar el mercado interno",
explicó el ministro.
"Sin embargo -advirtió-, Argentina sigue siendo sometida
a una permanente presión", ya que "existe una especulación permanente
sobre nuestra economía".
Aclaró que ese 7 por ciento que "no ingresó a los
canjes de deuda en 2005 y 2010 pueden hacerlo a partir de ahora", ya que
la Argentina "está en condiciones de atender y regularizar a ese 7 por
ciento que no entró, exactamente en los mismos términos que los que lo
hicieron".
Lorenzino señaló que lo que se pretende "es asegurar
que aquellos que entraron no les sería traicionada su confianza con condiciones
más beneficiosas", y explicó que "es fundamental brindar esa
seguridad a los que ya entraron, con los que vamos a seguir honrando la
deuda".
"Nos parece importante dejar en claro nuestro
compromiso de no ofrecer nada mejor, es la misma oferta", sostuvo; aclaró
que el cobro en la Argentina con legislación local será una opción voluntaria
para los acreedores que adhieran al canje, y reafirmó que "no se intenta
escapar a la justicia como dicen los lobbistas".
El ministro consideró que se busca "alejar toda especulación
e incertiudmbre respecto del crédito de Argentina", y lamentó que lo que
se ha pagado hasta el momento "parece que para algunos no es
suficiente".
"Quienes quieran seguir haciendo juicios nos van a
encontrar defendiendo como siempre los intereses de los argentinos",
aseveró, y advirtió que "como dijo la presidenta Cristina Fernández de
Kirchner, el pasado está a la vuelta de la esquina, parece que se fue pero
amenaza con volver".
Axel Kicillof, por su parte, aseguró que "Argentina no
debe caer en la trampa del sistema financiero de pagar deuda con más
deuda", y consideró que "la propuesta argentina es generosa y
equitativa con un estricto criterio de justicia".
Afirmó que con el blindaje Argentina "estaba en una
situación de default encubierto", y remarcó que el blindaje "era
imposible, lo sabía todo el mundo, era incobrable", ya que el objetivo era
"endeudarnos más y someternos, y restarnos soberanía e independencia
económica".
El funcionario reseñó que "se ha pagado hasta el último
centavo de dólar durante todos estos años, y ahora nos reclaman que paguemos
todo a esos fondos buitre que los compraron a precio vil cuando ya estábamos en
default".
"Estamos en peligro, porque nos reclaman que paguemos a
los fondos buitre para que tengan la excusa para venir a reclamar de nuevo esos
papeles que hoy para nosotros son cartón pintado", alertó.
Kicillof insistió con que la Presidenta "ha tomado la
decisión de que aquellos que no entraron en los canjes que entren en razón, y
que entren en los canjes que les vamos a pagar", y afirmó que Argentina
"les va a pagar también a ellos pero no como buitres sino como
holdauts".
"Le pedimos a los tribunales de EEUU que nos dejen
seguir pagando los bonos reestructurados, pero si nos obliga a que la plata que
entra para los demás bonistas tenga que ir primero a los buitres, entonces ya
no podemos pagarles a los demás para pagarle a ellos", advirtió.