Las cartas del abuelo Pascasio. Una querella en Madrid
martes 25 de junio de 2013, 23:59h
Muy querida nieta Cristina:
Tenés
que perdonar que los abuelos somos un poco pesados con el tema del Centro
Gallego de Buenos Aires. No podemos bajar la guardia porque tenemos
individualizados ---desde acá se controla mucho--- a un grupito de
especuladores que se quieren quedar con nuestra querida entidad de Belgrano y
Pasco. La intención no es otra que hacer guita intermediando con las diferentes
Obras Sociales mediante la reserva de plazas de internación o sea de camas
hospitalarias. En realidad no es un curro nuevo, viene de los tiempos en que
Juan Antonio Burgueño fue nombrado como director por la Fundación Galicia
Saúde.
Si te
somos sinceros, Cristina, lo que más nos duele no es que haya empresarios que
se dedican a ganar dinero con la salud pública, es legítimo, pero lo que ya te
calienta es que tengan coimeros infiltrados en el Centro Gallego para defender
sus intereses económicos. ¿Sabés de qué estamos hablando? ¡Ojo! Ciertas
conductas irregulares pueden ser constitutivas de delito y por lo tanto
factibles de persecución penal. Si analizamos la crisis institucional que llevó
al presidente a Vello a renunciar encontraremos que había felones en el
interior, es decir, traidores que se llenaban la boca defendiendo a la
institución pero en realidad eran espías al servicio del enemigo.
Nosotros
te pedimos que cuando hablés con Alicia la prevengas para que el interventor La
Blunda no se duerma ---ni una siestita--- porque de lo contrario se lo van a
morfar los buitres que andan rondando por la asistencia sanitaria porteña para
ver donde pueden enganchar sus afiladas y depredadoras uñas. Para que veas que
no exageramos te informamos ---a lo mejor ya lo sabés--- que un juez de Madrid
[en concreto el titular del Juzgado de Instrucción número 4]aceptó una querella
presentada por la asociación de médicos AFEM contra varios cargos de la
Consejería de Sanidad por los presuntos delitos de prevaricación,cohecho,fraude
y malversación en adjudicaciones sanitarias.
¿Sabés
cómo se apellida uno de los llamados a declarar? Es fácil: Burgueño. El antiguo
capo en el Centro Gallego es ahora director general de Hospitales del Servicio
Madrileño de Salud. En la querella se acusa a Juan Antonio Burgueño de posibles
irregularidades en los conciertos para la asistencia privada por vinculaciones
de cargos políticos presentes en empresas concesionarias y por la posible
negligencia en el control el gasto público. Vaya por delante, Cristina,la
presunción de inocencia pero no podemos ocultar nuestra sorpresa de que
Burgueño fuese quien administrase los euros gallegos que la Xunta enviaba con
generosidad para ayudar a mantener al Centro Gallego. A lo mejor vino a Buenos
Aires para aumentar su curriculum para
después en Madrid meterse de lleno a reventar la sanidad pública.
Bueno,
me despido. Te rogamos no dejés de colaborar con la entidad de la cual sos
Presidenta de Honor para que vuelva al camino de la buena gestión que fue
nuestra seña de identidad durante más de 90 años. Recibí un abrazo del
emigrante fonsagradino que encontró la felicidad en las orillas del Río de la
Plata.
Pascasio
Fernández Gómez