"Cuenten conmigo", le dijo a Carlotto
El Papa se mostró dispuesto a ayudar a las Abuelas en la búsqueda de los nietos apropiados
miércoles 24 de abril de 2013, 10:57h
Estela de Carlotto aseveró que Francisco le dijo
"cuenten conmigo, estoy a su disposición" ante el reclamo para que
interceda y las ayude en la búsqueda de los nietos apropiados durante la última
dictadura cívico militar.
"Hoy empezamos un nuevo camino con mucha
esperanza", expresó Carlotto en una rueda de prensa en la embajada
argentina ante la Santa
Sede, tras el encuentro con el papa que se dio en el marco de
la audiencia pública que se celebró esta mañana en la plaza San Pedro del
Vaticano.
Carlotto, quien dijo estar "satisfecha y
emocionada" tras el encuentro con el papa argentino, relató que -ante su
pedido para que interceda en la búsqueda de los nietos- Francisco les dijo
"`Cuenten conmigo, estoy a disposición´ y eso fue suficiente".
"Es la palabra de él. Ahora nace otra instancia. Vamos
a quedar en compás de espera para ver que respuesta hay en la iglesia
argentina", remarcó la dirigente de derechos humanos.
El encuentro con el papa se produjo en el marco de la
tradicional audiencia de los miércoles, cuando -de pie y por unos minutos- Francisco saludó a Carlotto, que se encontraba acompañada por otra abuela
de Plaza de Mayo, Buscarita Roa, y el legislador porteño, Juan Cabandié, hijo
de desaparecidos.
Carlotto le entregó al pontífice un pañuelo blanco -símbolo
de la lucha de las Abuelas- y una carta, en la que le solicita la apertura de
"los archivos del Vaticano, de la iglesia argentina y de comunidades como
el Movimiento Familiar Cristiano, donde monjas recibían niños de la dictadura
militar y los daban en adopción", según explicó.
La comitiva argentina estaba ubicada en el denominado
"sagrato", que es un espacio privilegiado en la plaza San Pedro, a
donde se acerca el Papa para saludar a los invitados especiales tras la
audiencia.
Junto a las abuelas de Plaza de Mayo, se encontraba la
religiosa Geneviève Jeaningros, sobrina
de Léonie Henriette Duquet, la monja francesa detenida ilegalmente en la
iglesia Santa Cruz de Buenos Aires, durante la dictadura militar, en diciembre
de 1977.
Los restos de la monja francesa fueron enterrados en el
jardín de esa iglesia en el año 2005 -donde también se encuentran María Ponce
de Bianco y Esther Careaga, fundadoras de Madres de Plaza de Mayo- por una
gestión del entonces arzobispo de Buenos Aires, Jorge Bergoglio, hoy papa
Francisco.
Carta que le entregaron a Francisco:
Las Abuelas en el Vaticano
Santidad
Las Abuelas de Plaza de Mayo queremos manifestar nuestra
satisfacción frente a la elección de un Papa argentino, que ayudará, con su
sabiduría, a trabajar por los sectores más olvidados y desposeídos.
Agradecemos además que tuvo la amabilidad de habernos recibido
y deseamos que, en su nuevo rol como máxima autoridad de la Iglesia Católica,
pueda arbitrar los medios necesarios para colaborar en la búsqueda de los casi
400 nietos y nietas que aún hoy no han recuperado su verdadera identidad. Así
como también nos ayude a saber qué ocurrió con nuestros hijos e hijas
desaparecidos, durante la última dictadura cívico-militar.
Sabemos que nuestros nietos, por su edad, podrían vivir en
cualquier ciudad, por lo que su colaboración, será de gran importancia para potenciar
la visibilidad de nuestra desesperada búsqueda a los ojos del mundo.
Las Abuelas buscamos de manera pacífica, a través del
diálogo y la justicia, reconstruir lo que el terrorismo de Estado quiso borrar.
En este largo camino, que comenzamos solas, con peligro, dolor, miedo y
desconocimiento, uno de los grandes obstáculos ha sido el silencio.
Hoy, gracias Dios, contamos con el acompañamiento de un
amplio sector de la sociedad, aunque hay grupos que aún mantienen los pactos de
silencio instaurados por el terrorismo de Estado.
La dictadura no sólo aniquiló a nuestros hijos y se robó a
nuestros nietos, sino que además disolvió todas las pruebas que nos permitirían
saber qué hicieron con ellos. Es por eso que para nosotras, cualquier dato, por
mínimo que parezca, es un bien fundamental para poder localizar a los hijos de
nuestros hijos. En este sentido, solicitamos a Usted, que pida a los miembros
de la Iglesia
Católica y a sus feligreses que brinden la información que
tengan sobre el paradero de nuestros nietos y nietas desaparecidos.
Las Abuelas hemos restituido la identidad a jóvenes que
fueron entregados en adopción por el Movimiento Familiar Cristiano; la justicia
argentina ha citado a declarar a Hermanas que durante la última dictadura
trabajaban en lugares donde funcionaban Centros Clandestinos de Detención, como
lo fue Campo de Mayo. Ellos seguramente puedan brindar información precisa.
Han pasado ya 35 años desde que comenzamos a buscar a
nuestros familiares, queremos abrazar a nuestros nietos y contarles su
historia. Por eso rogamos a su Santidad explique a los miembros de la Iglesia y a sus feligreses
que es un deber cristiano brindar información sobre el destino de los niños
desparecidos en Argentina. Que Usted les advierta que constituye un pecado
ocultar crímenes catalogados por la comunidad jurídica internacional como de
lesa humanidad, como lo son secuestros, asesinatos y robos de bebés perpetrados
por el terrorismo de Estado.
El año pasado la justicia argentina comprobó la existencia
de un Plan Sistemático de Apropiación de Menores durante el régimen militar, y
se juzgó a los responsables de este delito. No obstante, el juicio no sirvió
para obtener información que nos ayude a localizar a nuestros nietos.
Es en este sentido que rogamos también a Usted, tenga a bien
abrir los archivos del Vaticano, así como los que existen en los arzobispados
de Argentina, para conocer si allí hay algún dato que nos dé la felicidad de
encontrar alguno de nuestros nietos.
Saludamos a Usted, con toda consideración
Abuelas de Plaza de Mayo
A su Santidad
Francisco
CIUDAD DEL VATICANO