Por el presunto soborno a senadores en el Congreso
Arranca el juicio oral al ex presidente De la Rúa
sábado 11 de agosto de 2012, 22:44h
El ex presidente Fernando de la Rúa será juzgado desde el
próximo martes por "cohecho activo agravado", a raíz del pago de
sobornos a senadores durante su Gobierno, para que voten a favor de aprobar una
la Ley de Reforma Laboral, un proceso que se prevé durará entre seis y ocho
meses.
Para el juicio han sido convocados 339 testigos, entre ellos
la presidenta Cristina Fernández de Kirchner -que pidió declarar por escrito-,
quien en aquella época era legisladora y votó en contra del proyecto impulsado
por el gobierno de la Alianza.
El Tribunal Oral Federal 3 dará inicio al juicio con la
lectura de los requerimientos de elevación de la fiscalía, los querellantes y
finalmente del juez federal Daniel Rafecas que instruyó la causa en su tramo
final, en una audiencia que se prevé durará unas seis horas, para luego pasar a
cuarto intermedio hasta la semana siguiente, cuando está previsto el inicio de
las declaraciones indagatorias de los juzgados.
De La Rúa llegará a juicio procesado por "cohecho
activo agravado" a raíz de haber presuntamente dado el aval al pago de los
sobornos -que la Justicia dio por probado- que se efectuó a senadores
opositores en el 2000 para lograr la sanción de la ley de reforma laboral, ya
derogada.
Además serán juzgados el ex secretario parlamentario del
Senado, Mario Pontaquarto; el ex ministro de Trabajo de la Alianza, Alberto
Flamarique; el ex jefe de la SIDE Fernando de Santibañes y los ex senadores
Augusto Alasino, Alberto Tell, Remo Constanzo y Ricardo Branda.
Uno de los ausentes del juicio será el ex senador
justicialista Emilio Cantarero, mencionado por la prensa como quien confesó lo
ocurrido a una periodista, quien fue declarado inimputable por sufrir del mal
de Alzheimer, en tanto otro acusado, el ex jefe del bloque radical en la Cámara
Alta, José Genoud, se suicidó.
El primero en ser llamado a indagatoria en el inicio del
debate en los tribunales federales de Comodoro Py será el arrepentido ex
secretario parlamentario Pontaquarto, porque los jueces Gerardo Larrambebere,
Miguel Pons y Guillermo Gordo pretenden reconstruir todo desde el principio, en
caso de que el procesado acceda a hablar ante ellos, explicaron a Télam fuentes
del tribunal.
En total 17 testigos solicitaron responder por escrito en el
juicio, entre ellos la Presidenta de la Nación, el legislador porteño Anibal
Ibarra, la embajadora Alicia Castro, el dirigente gremial Victor De Genaro, el
gobernador José Luis Gioja, el ex presidente Carlos Menem, y los diputados
Héctor Recalde y Jorge Yoma, un privilegio al que pueden acogerse por sus
fueros, por lo que el Tribunal irá definiendo esas declaraciones y los
cuestionarios a medida que surjan en el juicio elementos de pregunta a cada uno
de ellos.
Al momento de la sanción de la ley, la actual Presidenta era
senadora y se opuso en la votación a la reforma laboral.
También será testigo el titular de la CGT, Hugo Moyano, a
quien se adjudica haber citado al ex ministro Flamarique diciendo "para
los senadores tengo la Banelco", en relación a la votación de la ley que
era resistida y exigida por el Fondo Monetario Internacional (FMI).
Un testigo de relevancia será un chofer de la ex SIDE que
habría llevado a Pontaquarto en el trayecto de búsqueda del dinero para los
sobornos.
También está citado el ex vicepresidente Carlos
"Chacho" Alvarez, quien renunció al gobierno de la Alianza cuando
comenzó a destaparse el escándalo de los sobornos, en octubre de 2000.
En el listado se incluyó también a dirigentes gremiales como
Armando Cavalieri y a ex funcionarios de la Alianza como el ex ministro del
Interior, Federico Storani, al ex jefe de Gabinete Rodolfo Terragno y el ex
secretario privado de la Presidencia, Leonardo Aiello, entre muchos otros.
El juicio estaba previsto para noviembre pasado pero se
suspendió a horas del comienzo debido a un inconveniente con la defensa de
Pontaquarto, quien en el interín fue condenado a dos años y un mes de prisión
por omitir declarar viáticos en el Senado.
Esta será la primera vez en que un ex primer mandatario
argentino será juzgado por un hecho de soborno, ya que el antecedente conocido
es el juicio oral al que se sometió al ex presidente Carlos Menem, pero por
contrabando de armas a Croacia y Ecuador, en el que resultó absuelto.
Según la causa judicial, la SIDE entregó cinco millones de
pesos para repartir a senadores del bloque justicialista por su voto favorable
a la sanción de la ley, dinero que habría manejado Pontaquarto en persona,
guardado en su casa y luego llevado a la de Cantarero para el reparto.
El escándalo salió a la luz a raíz de un anónimo que circuló
en el Congreso, el cual se cree fue confirmado por Cantarero y finalmente
ratificado ante la Justicia por el ex secretario parlamentario Pontaquarto tres
años después.
De la Rúa quedó implicado y fue procesado a raíz de darse
por probado que hubo una reunión previa en la Casa de Gobierno donde se lo
había informado de la intención de realizar un hecho ilegal para lograr la
aprobación de la ley y el entonces presidente habría dicho "eso arréglenlo
con De Santibañes".
Los acusados llegan al juicio procesados por "cohecho"
activo -los funcionarios- y "cohecho" pasivo -los senadores-, a raíz
del supuesto pago a senadores de 4.300.000 pesos el 26 de abril de 2000 en la
casa del entonces senador Cantarero, tras finalizar la sesión donde se votó la
ley de Reforma Laboral.
Según la acusación del fiscal federal Federico Delgado, que
instruyó el caso, resultó creíble lo referido por el ex secretario parlamentario
Pontaquarto, quien confesó haber llevado las valijas con el dinero desde la
SIDE, por ese entonces a cargo de De Santibáñes hasta el Congreso Nacional.
El "cohecho activo agravado y malversación de caudales
públicos", delito por el que quedó procesado De la Rúa, prevee penas de
hasta diez años de prisión.
De la Rúa fue incorporado a juicio después de muchos pasos
judiciales, por decisión del juez federal Rafecas, quien encontró pruebas para
entender que sabía de lo ocurrido y dio su aval para que sucediera