Acoso al alcalde en plena calle: ¿se pasaron con Gallardón?

Nosotros tenemos claro que un político electo, sobre todo cuando tiene un cargo público, tiene que responder ante la ciudadanía por su gestión. Por esa razón es por lo que el movimiento 15-M ha tenido tanto éxito entre la población: concenciación sobre la lejanía de la clase política. Pero puede que debamos establecer límites, y es lo que ahora queremos traer a debate. Ayer lunes, se convocó en Madrid una cacerolada más que comprensible y sana en democracia, como toda protesta pacífica y motivada. El objetivo era protestar contra la posibilidad de que este año las fiestas del Orgullo Gay no puedan contar con actos en la calle por las quejas vecinales. Pues bien, la protesta derivó en una concentración  en pleno domicilio del alcalde, Alberto Ruiz Gallardón, del que todos conocen su dirección puesto que él se jacta de vivir en un piso céntrico y sin el habitual distanciamiento de otros dirigentes, que por razón o no de su cargo, prefieren morar en apartados chalets fuera de las ciudades. Es normal en Madrid haberse cruzado alguna vez con Gallardón, quien a pesar de contar con escolta, pasea a su perro a plena luz en la calle, en la zona de Alonso Martínez, un céntrico barrio de la capital. Los concentrados no mostraron, por supuesto, ninguna pose de violencia contra el máximo mandatario del ayuntamiento de Madrid, pero la situación rozó el acoso. Gallardón, visiblemente molesto y agobiado (pueden ver la foto, colgada en Twitter por @esjapo), atendió no obstante a los manifestantes en pleno portal de su vivienda. Se quejó, con razón, de que esto formaba parte de su vida privada y que "no era justo". Según informa RTVE, también les achacó que "aquí viven mi mujer y mis hijos" y que, por tanto, "hacerle esto a mi mujer y a mis hijos no es de justicia", les reprochó. Sus palabras no calmaron ni hicieron cambiar de parecer a los concentrados, que le siguieron por al calle con gritos de “Gallardón, dimisión” y “no nos representas”. Finalmente, los servicios de seguridad le tuvieron que meter en un coche oficial para alejarle de la zona. Insistimos: una cosa es la sana protesta y la exposición de la vox populi y otra, adentrarse en parcela privada de la vida de los políticos. Eso no nos hace mejores. >> Vea el vídeo: Gallardón, acosado por una protesta ______________________________________________________ - Anteriores Im-presentables: Barberá acusa al movimiento del 15-M de "cultivar marihuana" ¿Nos ha engañado Bildu? ¿Podrán visitar los Reyes San Sebastián? Aumento de pecho para una niña de siete años ________________________________________________________ Éstos fueron los Im-presentables de las anteriores ediciones de nuestro Premio ________________________________________________________ ENVÍENNOS SU IM-PRESENTABLE ¿Tiene usted un im-presentable? Diariocrítico abre esta sección a la opinión de los lectores. ¿Tiene usted un candidato? Envíenoslo a este correo [email protected]. ¿Quiénes son im-presentables para nosotros? Pues gentes que sin duda merecedoras de respeto, que habitualmente se comportan con normalidad, pero que, ocasionalmente, hacen cosas im-presentables. Gentes conocidas, populares, que a veces se ‘pasan' unos cuantos pueblos. Pretende ser una sección amable. Una cosa es ser (ocasionalmente) im-presentable y otra merecer la condena de la sociedad por acciones repudiables y aborrecibles.