Las FARC no están acabadas

En ese sentido, dentro de la contemplación de nuevas estrategias se ha regresado a la tradicional “guerra de guerrillas”, en la que los subversivos atacan y se esconden con el fin de no tener que enfrentar a su enemigo; así mismo realizan otro tipo de acciones sorpresa, como la detonación de explosiones al paso de convoyes militares por las carreteras, apunta el analista Jorge Restrepo, director del CERAC.

Reflejo de esta situación son los al menos 20 policías y militares que han muerto esta semana en diversos ataques que ponen en evidencia que el grupo guerrillero sigue muy activo, "no se desestructuraron”, y siguen teniendo "una capacidad operativa importante".

"Retrocedimos 15 años", porque en este 2010 se están registrando unos 60 ataques armados a la semana, lo que da "unos 700 al año", una cifra "similar a la de 1994", advirtió Restrepo, quien señaló que si las cosas siguen así el año terminará con "cerca de mil" policías y militares muertos en combates, atentados o por explosiones de minas antipersonal, pese a lo cual no se podría decir “que haya un diciembre negro".

Ya al respecto la Agencia de Noticias nueva Colombia (ANNCOL), vocera de las FARC, había expresado que “se presagia un fin de año intenso” en el que los rebeldes “se alistan para golpear con contundencia a las Fuerzas Militares”. De hecho, el propio presidente, Juan Manuel Santos, hace algunos días aseguró que según informes de inteligencia, las FARC estarían preparando ataques contundentes para vengar la muerte del “Mono Jojoy” durante la culminación del 2010.

Según Restrepo “bombardeos contra cabecillas como ‘Jojoy’ han tenido éxito, pero la violencia podría recrudecerse en un futuro de la mano de una guerrilla dispersa, sin comando ni control”.

Según fuentes del Gobierno, tan solo en el año han muerto 174 policías; sin embargo, un informe reciente de la organización no gubernamental Corporación Nuevo Arco Iris, señala que, en lo que va de año, cerca de dos mil militares han muerto o quedado heridos en acciones guerrilleras.

Por otro lado, de acuerdo con las investigaciones del CERAC, la guerrilla se concentra actualmente en cuatro regiones: Urabá, Cauca indígena hasta Ecuador, Meta, Caquetá, y la "media luna" alrededor de la frontera con Venezuela; mientras que en las ciudades, solamente mantienen cierta capacidad en Cali, Buenaventura y Neiva, todas en el sur, "especialmente con milicias que colocan explosivos", detalló Restrepo.

A este respecto la Corporación Nuevo Arco Iris destaca que las FARC "han recuperado territorio" en el Caquetá, Huila, Tolima y la costa pacífica, donde opera su Bloque Sur, y allí "muestran una actividad militar constante".