A lo largo de 2008, se constituyeron en Cantabria un total de 14.604 nuevas hipotecas sobre viviendas, lo que supone un 38,4 por ciento menos que en el año anterior. Asimismo, el importe medio de cada una de las operaciones se redujo un 28,3 por ciento, hasta situarse en 127.072 euros.
Así lo indican los datos difundidos por el Instituto Nacional de Estadística (INE), que además señala que en el mismo año se hipotecaron en la región 21.513 fincas (21.040 urbanas y 473 rústicas) que sumaron un capital global de más de 3.000 millones de euros.
De las hipotecas sobre fincas urbanas -que significaron un capital cercano a los 2.900 millones- la mayor parte correspondieron a viviendas -14.604 hipotecas por valor de 1.855 millones-, seguido de otro tipo de fincas -5.863, por importe de 502 millones- y solares -573, por valor de 537 millones-.
En cuanto a los préstamos, la mayor parte de ellos corrieron a cargo de cajas de ahorro -13.568 préstamos por valor de 1.700 millones-, seguido de bancos -6.242, por importe de algo más de 1.000 millones- y otras entidades -1.230 préstamos que sumaron más de 188 millones-.
Respecto a las hipotecas sobre fincas rústicas -que supusieron un capital total superior a los 108 millones-, la mayoría de los préstamos fueron concedidos también por cajas de ahorro -289 préstamos por valor de 53 millones-, bancos -94 por importe de 29 millones- y otras entidades, que concedieron 90 préstamos por valor aproximado a los 25 millones de euros.
Además, en 2008 se cancelaron en Cantabria 10.635 hipotecas -6.953 sobre viviendas, 3.220 sobre otro tipo de fincas urbanas, 236 sobre fincas rústicas y 226 sobre solares y se realizaron cambios en otras 3.334.
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