Taiana no pone plazos para resolver el caso de Aerolíneas

Taiana evaluó el estado de las negociaciones sobre el futuro de Aerolíneas Argentinas una vez decretada la expropiación durante una rueda de prensa junto con su colega español, Miguel Ángel Moratinos, en el marco de la visita de Estado a España de la presidenta argentina, Cristina Fernández.

Según Taiana, la ley que se está tramitando en el Parlamento argentino para expropiar la compañía aérea, después de 18 años de gestión española, sigue su curso, al igual que los contactos con Marsans.

"No pondría plazos. Hay conversaciones que se están desarrollando en un ambiente positivo y no es mucho más lo que puedo decir", dijo el canciller argentino ante la posibilidad de que se pueda firmar algún tipo de acuerdo con motivo de la presencia de Cristina Fernández en Madrid.

La salida al caso pasaría por que el Estado argentino asuma la señal entregada a la fabricante Airbus por los aviones comprados para Aerolíneas Argentinas y que Marsans retire la demanda interpuesta ante el órgano de arbitraje del Banco Mundial por la expropiación.

Según Taiana, la nacionalización de Aerolíneas Argentinas no ha abierto ninguna "crisis" en las relaciones bilaterales, ni tampoco ha suscitado un clima de "desconfianza" en el resto de empresas españolas con inversiones en Argentina.

El canciller subrayó que el hecho de que el Parlamento de su país sea el que esté discutiendo la ley es la "mayor garantía de seguridad jurídica" que se puede dar a este caso.

"Lo que esta haciendo el Gobierno (argentino) es cumplir con esa ley, que fue modificada por el Congreso para establecer la expropiación", manifestó.

Taiana añadió: "Es un proceso que está en marcha y me parece que tiene la mayor garantía jurídica que le pueda dar a un Estado, que es la garantía de una decisión tomada por los representantes del pueblo".
Hizo hincapié en que la prueba de que "la confianza y el entusiasmo" de las empresas españolas con negocios en Argentina no está cuestionada es que hay proyectos y alianzas en marcha con compañías locales.

Moratinos expresó su confianza en que el contencioso de Aerolíneas Argentinas se pueda solucionar de forma "satisfactoria", aunque puntualizó que deben ser las empresas las que concreten esta salida.

El ministro de Exteriores de España declaró que la relación tan "intensa, fructífera y positiva" que hay entre los dos países permite que "si hay problemas, se hablan, se discuten y se resuelven".
"Los canales están abiertos si hay problemas", apostilló.

Coincidió en que el balance de la presencia de empresas españolas en el país sudamericano es "extremadamente positivo" y que su intención es mantener sus negocios en el futuro.

"Las empresas han desempeñado un papel de compromiso en relación con el futuro económico y social de Argentina. Apostaron por Argentina en momentos difíciles y apostaron no para obtener beneficios a corto plazo, sino por tener un proyecto a medio y largo plazo", comentó.

"La vocación de los empresas españoles es seguir estando presente en Argentina. Es nuestro deseo y nuestra realidad", concluyó.

El posible acuerdo entre Marsans y el Gobierno argentino pasa por la decisión de Airbus
El posible acuerdo entre Marsans, dueño de Aerolíneas Argentinas, y el Gobierno de Argentina, pasa por la decisión que tome la empresa Airbus de aceptar que el grupo español ceda alguno de los aviones que tiene pedidos a la compañía argentina.

Fuentes del sector indicaron hoy a EFE que existe un principio de acuerdo entre ambas partes para cerrar el litigio que mantienen abierto desde el año pasado y que motivó que el Gobierno argentino adoptara la decisión de nacionalizar la aerolínea.

Este acuerdo pasa porque Argentina asuma parte de los compromisos contraídos por Marsans el pasado noviembre, cuando firmó en Toulouse la confirmación de un pedido de 61 aviones a Airbus, de ellos cuatro A380, por un importe, a precio de catálogo, de 6.100 millones de euros.

El problema, según las fuentes consultadas por EFE, se encuentra en que el fabricante europeo de aviación quiere tener las garantías suficientes por parte del Gobierno argentino de que avala la operación, ya que entienden que su acuerdo está firmado con Marsans y no con Aerolíneas Argentinas.

De firmarse el pacto entre Marsans y el Gobierno argentino, que debe cumplir además otra serie de requisitos, los aviones se podrían repartir entre Air Comet, compañía del grupo español, y Aerolíneas Argentinas.

Fuentes de Marsans consultadas por EFE declinaron hacer cualquier valoración al respecto.