La vicepresidenta primera del Gobierno, Fernández de la Vega, pidió al PP que "no patrimonialice los símbolos", y dijo que la mejor manera de de aproximar los símbolos a los ciudadanos no es mediante la coerción, sino con el convencimiento y sacando este asunto de la batalla política. La vicepresidenta afirmó que el Gobierno "cumple y hace cumplir" la ley, pero que no está dispuesto a convertir la bandera en "motivo de conflicto". "No se es más patriota por imponer, sino por convencer", concluyó.
Y en defensa del monarca también se lanzó el ministro de Defensa, José Antonio Alonso, quien garantizó al Rey "todo el apoyo que necesite" en defensa de su papel constitucional como jefe del Estado y símbolo de su unidad y permanencia. Alonso añadió que el actual Gobierno "no se proclama republicano, sino constitucional", y consideró que el futuro de la monarquía constitucional es "inmejorable".
Instauración de la III República
El capítulo más surrealista tuvo lugar en el Pleno Municipal de Humilladero (Málaga), que aprobó una moción, que presentó IU, para que se implante en España la III Republica, con 10 votos a favor -seis pertenecientes a IU y cuatro al PSOE-, mientras que la única concejala del PP en el Ayuntamiento rechazó la propuesta.
Tras la aprobación de la iniciativa, la comisión promotora de ayuntamientos por la III República pretende llevar la declaración a la sede del Parlamento de Andalucía.
Más lío de banderas
Y en Galicia continúa la polémica de las banderas gracias ya que BNG y PSdeG evitaron que prosperase una moción del PP gallego para que las banderas españolas ondeen en los ayuntamientos. Según el PP, los dos partidos socios del Ejecutivo autonómico rechazaron en el Parlamento gallego una proposición no de ley de los populares que pedía el cumplimiento de la Ley de Banderas en la región gallega.