El flamante funcionario sorprendió gratamente cuando pidió abordar "deprisa" la ley que regula el voto rogado, ya que “tenemos más de 2,4 millones de españoles viviendo fuera. En el año 2011 se hizo una ley que hizo descender la participación en las elecciones del 30 al 5 por ciento. Esa ley hay que cambiarla deprisa, tan pronto como se pueda”.
Borrell afirmó que "esa ley hay que cambiarla y cambiarla deprisa", y para que no queden dudas con su pedido remarcó que este sistema provocó que sólo vote el 5% de los españoles en el exterior cuando antes lo hacía el 30%.
"El sistema, no sé por qué razones se hizo, se ha demostrado que no funciona", resaltó Borrell quien se ilusionó con cambiar la ley "tan pronto como se pueda".
En ese sentido se lo vio optimista, ya que consideró que "que habría consenso parlamentario" para modificar la norma.