La cooperativa azucarera celebrará su asamblea general el 5 de diciembre
Acor obtuvo 21,29 millones de euros antes de impuestos en la campaña 12/13, un 38% más que en la anterior
Rico ve "de necios" dejar perder la remolacha y pide un apoyo decidido de las administraciones para un precio mínimo
domingo 01 de diciembre de 2013, 17:54h
La Sociedad Cooperativa General Agropecuaria
Acor obtuvo 21,29 millones de euros antes de impuestos en la campaña
2012-2013, lo que supone un incremento del 38 por ciento respecto a la
campaña 2011/2012 (15,34 millones de euros), con un resultado negativo
de 139.280 euros de la sección de biodiésel, donde hace un año el
resultado fue de 131.268 euros positivos.
Este incremento de la cuenta de resultados se suma al aumento del
261,79 por ciento que se computó en la campaña 2011/2012 respecto a la
campaña 2010/2011, con 4,24 millones de euros.
Según consta en el informe anual recogido por Europa Press que
será presentado en la Asamblea General de Acor que se celebrará este
jueves, 5 de diciembre, se trata de un resultado "especialmente
destacable" ante las circunstancias "nada favorables" que han marcado en
este ejercicio las campañas productivas tanto de remolacha-azúcar como
de aceite-biodiésel en Olmedo (Valladolid).
Así, se ha aplicado un retorno de 12 euros por tonelada de
remolacha de cuota amparada en participación, cifra que supone un
incremento del retorno satisfecho al socio de 4 euros/tonelada. El socio
de Acor percibió un total de 52,32 euros/tonelada para ese tipo de
remolacha y un precio único de 40 euros/tonelada para la remolacha tipo
para toda la remolacha excedentaria de la campaña (ambas incluyen las
ayudas acopladas estatal y comunitaria que todavía persisten).
En la campaña 2012/2013 Acor recibió 817.114 toneladas de
remolacha en su molturadora de Olmedo, en una campaña caracterizada por
las fuertes y continuas lluvias registradas en otoño y a comienzos del
invierno en la mayor parte de Castilla y León "que dificultaron bastante
la recolección y ralentizaron enormemente las entregas de remolacha en
la Región".
La recepción de remolacha en la fábrica de Olmedo comenzó el 9 de
octubre de 2012, un día antes que en la campaña anterior, y terminó el
23 de febrero de 2013, tras 138 días --72 de recepción efectiva-- de
"irregulares entregas" que alcanzaron las 815.382 toneladas molturadas y
una molienda media de 9.481 toneladas por día, inferior a la de
ejercicios precedentes.
La molienda en Olmedo comenzó el 9 de octubre, el mismo día que la
recepción de remolacha, con entre 10.000 y 11.500 toneladas/día en los
días que no hubo lluvias con una posterior reducción cuando empezaron
las precipitaciones hasta llegar a parar el día 3 de noviembre,
situación que se normalizó a partir del 16 del mismo mes cuando se
volvió a moler, con una molturación más acorde con la capacidad de la
fábrica en diciembre.
De las 817.114 toneladas recogidas en la campaña 2012/2013, la
mayor parte (410.038) procedieron de la provincia de Valladolid,
mientras que el resto fueron entregadas por cultivadores de otras
provincias: 123.302 toneladas de Ávila; 102.978 de Segovia; 64.644 de
Burgos; 43.420 de Palencia; 27.529 de Salamanca; 21.155 de Zamora;
13.306 de León; 10.515 de Soria, y 227 toneladas de otras procedencias.
Menos socios
La Sociedad Cooperativa General Agropecuaria Acor tenía al cierre
del ejercicio 5.355 socios (1.540 menos que en la campaña anterior) como
resultado del proceso de regulación y ajuste de la actividad azucarera
que está realizando la cooperativa.
En este informe, el presidente de Acor, Carlos Rico, ha resaltado
que la campaña 2012/2013 debe considerarse como "francamente buena" a
nivel agrario y "muy complicada y bastante trabada" a nivel industrial.
En el informe se recuerda que este año "se ha vuelto a incluir" el
pago por parte de Acor de un montante de 2,30 euros por tonelada de
remolacha tipo a toda la remolacha de cuota de la cooperativa, en virtud
del compromiso adquirido por la industria azucarera de Castilla y León
con el Gobierno autonómico en marzo de 2008.
Rico pide un apoyo decidido
El presidente de la Sociedad Cooperativa
General Agropecuaria (Acor), Carlos Rico, ha advertido de que sería "de
necios" dejar perder el cultivo de la remolacha que tanta importancia ha
tenido en la comunidad autónoma de Castilla y León por lo que ha
exigido un "apoyo decidido" de las entidades públicas, con referencia
expresa al Ministerio de Agricultura y a la Consejería del ramo, que
permita alcanzar un precio mínimo para este producto.
"Sólo así mantendremos la llama viva de nuestra actividad
azucarera y el cultivo remolachero", ha defendido Rico, quien, tras
insistir en que sería de necios dejar perder un cultivo "tan valioso",
ha advertido también de que sería de "insensatos" pensar que el precio
se mantendrá bajo una vez se retire la Unión Europea de la producción de
azúcar.
"Suficientes ejemplos hemos tenido estos últimos años como para
sufrir otra amarga experiencia de la que nuevamente nadie se
responsabilizará", explica Carlos Rico en su informe del ejercicio
2012/2013, en el que hace un
llamamiento a los cooperativistas de Acor para que sepan adaptarse a la
situación, ya que, aunque "más inestable que la actual", será
"igualmente atractiva".
Carlos Rico asegura a este respecto que en estos momentos no hay
otra opción que la de mantener el cultivo y el sector "vivos" por lo que
anima a no tirar la toalla sino a afrontar y enfrentar todos los retos
que se pongan por delante, en referencia a la situación de precios a la
baja en el azúcar y a la nueva estructura de liberalización definida por
la nueva PAC que "abren interrogantes" y "potencian situaciones de
inestabilidad".
"Tenemos la necesidad, yo diría que la obligación, de marcarnos
los hitos que permitan por igual la continuidad de nuestra actividad
remolachera y azucarera, elementos de empuje imprescindibles para
garantizar el futuro de nuestras explotaciones y el abastecimiento de un
producto esencial como es el azúcar en la industria manufacturera
agroalimentaria", explica Rico en este informe.
En su informe del ejercicio 2012/2013 Carlos Rico destaca los
"resultados envidiables" de la campaña, con un retorno cooperativo de 12
euros/tonelada y un precio mínimo de 40 euros/tonelada, unas cifras
fruto del "acierto" de la apuesta de Acor basada en el mantenimiento de
un cultivo "tan necesario" para las explotaciones e "imprescindible"
para el desarrollo económico de Castilla y León.
Dicho esto, reconoce que esos buenos datos no deben cegar a la
cooperativa en la definición de sus líneas de actuación, al contrario,
considera, deben marcar el camino más eficiente en busca del futuro.
"Para ello debemos continuar ajustando nuestros procesos e instalaciones
para mejorar en competitividad", explica Rico, quien recomienda
aprender de los errores propios o inducidos adelantándose a las nuevas
situaciones ante un escenario "que poco tendrá que ver con el vivido
esta campaña".
Rico evidencia también la nueva política agraria y su limitación,
hasta 2017, del actual instrumento de cupos productivos de azúcar que
pone de manifiesto, a su juicio, el "flaco compromiso" de la UE, con
especial atención a "ciertos países", con el sector agroalimentario. "De
nuevo vemos perplejos como se marcan reglas de juego diferenciadoras
que dan ventajas sustanciales a nuestros más directos competidores con
la falsa excusa de defender precios más bajos, sin entrar a analizar la
realidad de esa producción y las garantías de la misma, ni estudiar tan
siquiera sus sistemas de protección interna", cuestiona Rico.
En este punto, ha puesto como ejemplo el ejemplo vivido en los
últimos años con la industria europea del biodiésel que, según sus
palabras, ha sufrido un "ataque indiscriminado" por parte de la
producción de biodiésel foráneo (argentino e indonesio), "producto que
entraba en España con fuertes ayudas de sus respectivos países anulando
cualquier capacidad productiva".
Carlos Rico admite que es "duro" ver cómo inversiones "potentes" y
proyectos "atractivos", como el que ha pretendido impulsar Acor para la
producción de biodiésel industrial, se han visto "relegados a la mayor
de las miserias" y "sin posibilidad alguna de defensa ante un atropello
tan vil y burdo como el que ha sufrido el sector en los últimos años".
No obstante, el presidente de Acor asegura que la capacidad
productiva de la planta de biodiésel de Olmedo --100.000 toneladas/año--
está acreditada por lo que ha deseado que se lleve a término la nueva
estructura diseñada para acceder al mercado nacional para poder
desarrollar la actividad consciente de que se ha abierto un camino
paralelo en el mercado alimentario con un "nicho comercial más
interesante", lo que permite a su vez mantener los contratos de semillas
oleaginosas en niveles económicos "dignos" para los socios de Acor.