Un año de prisión e inhabilitación para una doctora del Campo Grande de Valladolid por dar de alta indebidamente a un paciente que falleció
viernes 11 de octubre de 2013, 11:18h
El Juzgado de lo Penal número 3 de Valladolid
ha condenado a un año de prisión sustituible por una multa e
inhabilitación especial para el ejercicio de su profesión durante tres
años a una doctora que atendió a un paciente en el Hospital Campo Grande
de Valladolid en 2009 y que falleció poco después por una isquemia de
miocardio no diagnosticada.
Asimismo, la aseguradora AMA, en su calidad de responsable civil
de dicha doctora, ha indemnizado a la esposa e hijos del paciente
fallecido con 163.008 Euros, según se recoge en la sentencia remitida a
Europa Press por El Defensor del Paciente.
El 24 de febrero de 2009, sobre las 11.30 horas, A.P, de 56 años,
acudió al Servicio de Urgencias del Hospital Sagrado Corazón de
Valladolid, aquejado de dolor retroesternal recidivante, de 24 horas de
evolución.
De acuerdo con los factores de riesgo del paciente (edad,
hipercolesterolemia, sobrepeso) y tras realizar electrocardiograma y
analítica, se evidenciaron signos alterados --bloqueo de la rama derecha
del Haz de His y elevación de enzimas--, por lo que el médico que
atendió al paciente remitió a éste al Hospital Campo Grande con
indicción de ser visto por el Cardiólogo, especialidad de la que carece
el Sagrado Corazón. En el Informe de Urgencias de Derivación, el doctor
indicó expresamente "ser visto por Cardiólogo", según las mismas
fuentes.
A su llegada al Campo Grande, sobre las 13.00 horas, el paciente
fue pasado a consulta con la doctora de guardia, M.S.A, especialista en
Medicina de Familia. Según recoge el fallo, la doctora no amplió la
recogida de datos a través de una adecuada anamnesis, sino que realizó
una analítica y nuevo electrocardiograma, tras lo que diagnosticó al
paciente de "dolor torácico atípico" y no consideró necesaria la
presencia del cardiólogo, dando el alta al paciente con la única
indicación de tomar analgésicos para el dolor.
Durante la noche del día 28 de febrero, el paciente comenzó a
acusar nuevamente un fuerte dolor en el pecho, idéntico al que le había
llevado a Urgencias cuatro días antes, tal como señalan las mismas
fuentes, por lo que tomó un analgésico, de acuerdo con lo indicado por
la doctora. No obstante, el malestar fue en aumento, hasta que cayó
desplomado al suelo.
Mientras su hijo realizaba maniobras de reanimación, la esposa
llamó a una ambulancia, pero cuando ésta llegó, los facultativos
únicamente pudieron certificar la muerte del paciente.
Durante la instrucción de la causa en el Juzgado de Instrucción
número 4 de Valladolid, el médico forense informó de que la doctora que
atendió al fallecido en el Hospital Campo Grande "no consideró la
necesidad de que fuera valorado y explorado por el especialista en
Cardiología", sino que "se limitó a repetir las mismas pruebas ya
realizadas y no amplió la recogida de datos a través de la anamnesis y
pruebas complementarias". Sin embargo, el forense consideró que ésta
profesional "debió avisar en ese momento al Cardiólogo".
Según subraya El Defensor del Paciente, "de haberse realizado una
correcta anamnesis y explicación física", se hubiera descubierto que el
paciente "sufría una isquemia miocárdica crónica y estenosis coronarias
arterioescleróticas", evidenciadas en el Informe de Autopsia, que "bien
podían haberse resuelto mediante un tratamiento correcto precoz, incluso
quirúrgico".
La defensa del caso ha sido tramitada por el letrado Santiago
Díez, especialista en derecho sanitario y adscrito a los Servicios
Jurídicos de El Defensor del Paciente en Castilla y León.