Brillante, pero desorganizado primer día de la Expo del Agua

Durante tres meses Zaragoza será la capital mundial del agua en la que se producirán debates y se mostrarán innovaciones en torno al lema escogido "Agua y desarrollo sostenible" y que cuenta con la presencia de 105 países.

   Precisamente, sobre este eje temático se promueve la "exigencia de gestionar y conservar los recursos naturales, pensando en el presente y en las generaciones venideras mediante la cooperación y el avance tecnológico contra el deterioro medioambiental y el cambio climático", subrayó el Rey.

   En su intervención, enfatizó que "esa responsabilidad y ese compromiso a todos nos afectan" y confió en que cuando la Muestra se clausure, el próximo 14 de septiembre, "podamos subrayar con orgullo el éxito que ha supuesto y nos dispongamos a acometer juntos nuevos y grandes proyectos".

   Proyección internacional

   Precisamente, el éxito que supondrá la Muestra Internacional fue especialmente destacado por el Rey cuando manifestó que "es una cita clave para l proyección internacional de Zaragoza, Aragón y España" al indicar que se trata de un Exposición Internacional que "subraya el valor insustituible del agua como soporte de la vida y su función primordial para el desarrollo sostenible".

   A colación, precisó que se trata de dos aspectos "clave" que aborda la Exposición Internacional de Zaragoza 2008 y de la que apreció que supone un "proyecto de fuerte atractivo internacional" y cuyo impulso reconoció al Ayuntamiento de Zaragoza, además del apoyo del Gobierno de Aragón y del Gobierno de España para dejar constancia expresa de ese consenso "pues es el que ha guiado todo el trabajo volcado en la Exposición".

   Su Majestad también se refirió a la ciudad de Zaragoza para indicar que la Expo 2008 "da realce a una ciudad bimilenaria, hospitalaria e innovadora, que refleja el empuje y visión de futuro de esta Comunidad Autónoma en la construcción de una España moderna, democrática, abierta y solidaria".

   En este sentido, agregó que Zaragoza es, entre las ciudades europeas, "ejemplo envidiable de patrimonio y de crecimiento diversificado y sostenible con grandes transformaciones producto de la laboriosidad e ilusión de sus ciudadanos". Seguidamente, señaló que esta Exposición, en torno al Ebro "potencia su atractivo como destino turístico y sede de ferias y congresos".

   Esta descripción de Zaragoza también la extrapoló al resto de la Comunidad Autónoma de Aragón "con su honda raigambre histórica y cultural, clave para entender la identidad de España" y "ejemplo de importantes proyectos en su permanente avance y afán de profunda modernización".

   En su discurso, el Rey también reconoció el trabajo desinteresado de miles de voluntarios y destacó la "singularidad" de los pabellones para calificar de "síntesis perfecta".