No son sólo los cambios en la diplomacia española, de los cuales hemos dado cumplida cuenta en
Diariocrítico; no es sólo el ‘baile de embajadores’ , que ha puesto de los nervios a una cincuentena de diplomáticos con rango de embajador; no es el malestar por los ‘embajadores políticos’, aquellos que serán nombrados en capitales clave sin ser diplomáticos… es mucho más.
La próxima ‘movida’ en Exteriores va a tener mucho que ver con los flujos económico-migratorios-financieros y con dos Ministerios: Trabajo y el propio departamento de
Moratinos.