Desde tempranas horas de la tarde del sábado se registró un incendio en el Ávila, a la altura del distribuidor Sebucán, de la avenida Boyacá. Cerca de 150 efectivos entre bomberos, funcionarios de la Guardia Nacional, Protección Civil y voluntarios se movilizaron para contrarrestar las llamas.
El director nacional de Protección Civil, Antonio Rivero, informó que han sufrido por las llamas cerca de 10 hectáreas. El fuego persiste pero por la llegada de la noche los trabajos continuarán mañana a primeras horas.
“Hay ciertas complicaciones en el incendio por las horas nocturnas que representan un riesgo para la realización de los trabajos más aún cuando el fuego está a 1.300 metros de altura, después de 6 horas de combate del fuego el personal necesita reposición, hay aproximadamente 150 efectivos. Pese a que es un riesgo, parte del personal continúa operando en la parte alta para evitar la progresividad del incendio”.
Rivero dijo que las llamas casi llegan a un bosque de eucalipto y que de alcanzarlo la magnitud del siniestro sería mayor. “Van a ser difíciles las operaciones nocturnas debido a la iluminación y por las condiciones de viento y las zonas difíciles”, recalcó.
Anunció que mañana a primeras horas se repondrá mayor personal para atacar el incendio. Informó que no están en peligro viviendas cercanas y que las áreas afectadas no han sido calculadas aún porque fueron varios focos pero se estiman en más de 10 hectáreas, “que son significativas por el tipo de vegetación que se ha quemado”.
Se presume que fue la acción humana la que causó el incendio. “Todavía estamos en período seco, sin embargo, creemos que fue el factor humano lo que pudo haber incidido, fueron tres focos y no se pudieron dar espontáneamente, además el guardabosque reportó presencia de personas en las zonas del incendio”.
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