Restos de Eñloy Alfaro ya descansan en Montecristi

 Restos del general Eloy Alfaro, dos veces presidente de Ecuador, fueron trasladados hoy con honores de Guayaquil a Portoviejo, capital de la provincia de Manabí, camino de su natal Montecristi, donde esta mañana se instaló la Asamblea Constituyente.
Por insistencia del Gobierno y con permiso de la familia del "Viejo Luchador", que expresó su deseo de que sus restos reposaran en Guayaquil, parte de las cenizas del impulsor de la Revolución Liberal de 1895 serán enviadas mañana de Portoviejo a Montecristi, escogida como sede de la Constituyente por ser la cuna del caudillo.
En el cerro que domina Montecristi, en la Ciudad Alfaro, donde se construyó la sede de la Asamblea, también se levantó un mausoleo con forma y color de vasija de barro, al estilo de los enterramientos indígenas manteños de la zona, para depositar sus restos.
Frente al moderno edificio funcional que acoge el plenario y las comisiones de la Constituyente, en un corredor que se une con el mausoleo, también habrá un museo en memoria de Alfaro, cuyos familiares acompañaron hoy sus cenizas en el avión presidencial ecuatoriano desde Guayaquil hasta Portoviejo.
En una urna de cristal, parte de las cenizas se sacaron hoy de su tumba, en el cementerio general de Guayaquil y, con honores militares, fueron trasladadas al aeropuerto de la principal ciudad de la costa ecuatoriana y desde allí transportadas hasta el aeropuerto Reales Tamarindos, de Portoviejo.
Además de varios de sus familiares, acompañaron el traslado el ministro del Litoral, Ricardo Patiño, y el recién dimitido ministro de Obras Públicas, Héctor Villagrán, originario de la provincia de Manabí.
En la pista de Portoviejo los restos del general Alfaro fueron recibidos por los altos mandos de las Fuerzas Armadas, que acompañaron los restos, a paso de "funerala", en medio de un pasillo de cadetes de las escuelas de tierra, mar y aíre y escoltados por un piquete de honores.
En un carro de caballos, engalanado con flores y la bandera de Ecuador, se depositó la urna, escoltada por un grupo de caballería de los Granaderos de Tarki, la guardia presidencial ecuatoriana, y se inició un desfile hasta la rotonda del Parque Central de Portoviejo, donde hoy le rinden homenaje las autoridades locales.
Mañana, fecha en la que se celebrará la sesión oficial de inauguración de la Asamblea Constituyente, tras la instalación de hoy, los restos de Alfaro cubrirán los 25 kilómetros que separan Portoviejo de Montecristi y reposarán en su nuevo mausoleo, en el que aún faltan algunos detalles de construcción.
El presidente de Ecuador, Rafael Correa, presidirá los actos del traslado, a los que se espera la asistencia de miles de personas y de al menos dos jefes de Estado extranjeros, el colombiano Álvaro Uribe y el peruano Alan García, aunque no se descarta que también llegue el de Venezuela, Hugo Chávez.
Eloy Alfaro, nacido en Montecristi en 1842, fue asesinado en Quito y su cuerpo fue arrastrado por las calles y quemado en 1912, para impedir que llegara por tercera vez a la Presidencia, que ejerció de 1895 a 1901 y de 1906 a 1911.
En sus gobiernos impulsó el desarrollo de Ecuador y dedicó especiales esfuerzos a crear la instalación del ferrocarril y a promover la educación.