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Las nuevas zonas residenciales se alejarán del modelo anglosajón

El Ayuntamiento redistribuirá los comercios

El Ayuntamiento redistribuirá los comercios

El Ayuntamiento obligará a la distribución gradual de los espacios comerciales en las nuevas zonas residenciales para que los vecinos tengan los comercios cerca de sus casas.
    El Ayuntamiento de Madrid obligará a que los locales comerciales de las nuevas zonas residenciales y PAUs de la capital estén mejor distribuidos y que no se agrupen, para fomentar así el 'modelo latino' de comercio frente al anglosajón y que los vecinos tengan comercios cerca de sus casas.

    Así, cada vez que el Ayuntamiento estudie un proyecto para las nuevas zonas urbanizadas, realizará los cambios necesarios hasta que "el Ejecutivo municipal esté satisfecho con la distribución de los comercios", informó el director general de Comercio del Ayuntamiento, Daniel Gálvez.

    Con esta medida se intentará evitar la situación que se vive en zonas cuyo proyecto fue aprobado hace una década o más, como Sanchinarro, en el distrito de Hortaleza, donde las que las zonas de servicio terciario a las que está obligado el promotor fueron agrupadas, por lo que ahora el Ayuntamiento se ve obligado a construir un mercado municipal para suplir la falta de comercios en gran parte del PAU. "Promoveremos el modelo que sí hemos aplicado en Valdecarros", indicó Gálvez.

    El nuevo mercado estará situado en la calle Fernando de Rojas, esquina Aniceto Alcalá Zamora, y tendrá una superficie de 8.620 metros cuadrados. El Ayuntamiento formalizó a finales de junio la inscripción patrimonial de la parcela.

    Su interior se distribuirá entre una zona de mercado tradicional, aunque "en vez de tener muchos puestos pequeños se favorecerá menos cantidad con mayor volumen, para que luego no tengan que cerrar la mitad", puntualizó el director de Comercio.

    Además, el mercado tendrá otra zona con servicios más modernos, en la que el Ayuntamiento planea ofrecer servicios seleccionados "con un nuevo criterio, pensando en lo que piden los ciudadanos", como un gimnasio, restaurantes, escuelas de cocina o terrazas con Wifi.

    En la actualidad, los técnicos del Ayuntamiento trabajan en los pliegos técnicos y administrativos para el concurso de ideas, que saldrá a finales de verano. "El plazo para recibir propuestas durará dos o tres meses, y a principios de 2008 se adjudicará el proyecto", explicó Gálvez.

    Después, la empresa ganadora elaborará el proyecto de obra "durante aproximadamente un año", el cual se someterá a las modificaciones que el Ayuntamiento crea conveniente, y cuando sea aprobado definitivamente, se sacará a concurso la concesión de la obra pública. A quien se le adjudique no sólo construirá el nuevo mercado municipal, sino que también se beneficiará de su explotación durante 50 años. "Al final, la construcción empezaría por lo menos en 2009, si es que todo va rápido", apostilló Gálvez.

Tres nuevas zonas urbanas

    Sin embargo, Sanchinarro no es el único desarrollo urbano de la capital que cuenta con poco comercio. La mayoría de los edificios de viviendas de nueva construcción no alberga comercios en su planta baja, sino que ésta está dedicada también a pisos, que son más fáciles de vender que un local y que además reportan mayores beneficios.

    Así, de las cinco actuaciones que, por ejemplo, la constructora Lubasa tiene abiertas en Madrid sólo la de Vallecas tendrá comercios, mientras que las otras cuatro, situadas en el Monte de las Mercedes, Las Rozas, Arturo Soria y Doctor Esquerdo, serán íntegramente de viviendas a pesar de que alojarán a más de 250 familias.

    En la misma línea se encuentran otras constructoras, como Vallehermoso, que destinará a oficinas los bajos de su promoción de la calle Bravo Murillo, o Rayet, que en un barrio eminentemente residencial como Santa Eugenia, sólo ha habilitado uno de los bajos como local para un banco, mientras que el resto del edificio tendrá 90 viviendas, según indicaron fuentes de la constructora.

    Por ello, el Ayuntamiento planea construir al menos otro mercado municipal en el barrio de Las Tablas, en el distrito de Fuencarral, que albergará a casi 37.000 vecinos. Así las cosas, el Ayuntamiento estudia en la actualidad la viabilidad de una parcela en el PAU, "y en cuanto se inscriba patrimonialmente se iniciará el mismo proceso que en Sanchinarro", explicó Gálvez.

    El caso de Montecarmelo, también en Fuencarral y donde vivirán 25.600 personas, es "algo distinto", según el director de Comercio municipal, ya que "es un barrio mucho más nuevo y allí hay más bajo comercial, aunque aún está cerrado".

    Esta zona se encuentra en la "primera fase de la ordenación comercial, con sólo bares, farmacias y bancos", y poco a poco empezarán a aparecer más tiendas. "Al final de la evolución llegarán los restaurantes y las tiendas de lujo", argumentó Gálvez, quien reconoció que "en cualquier caso, nunca viene mal un mercado municipal".

    Valdecarros, en el distrito Villa de Vallecas, ha sido ya proyectado con esta nueva concepción de 'modelo latino'. "Hace año y medio nos pidieron que evaluásemos el impacto comercial de este PAU y vimos que tiene mucho bajo comercial en calles peatonales y espacios para grandes superficies".

    Aunque aún no hay planes concretos, el Ayuntamiento ya ha solicitado una parcela para construir un mercado municipal, según informó Gálvez, así que "cuando eche a andar la Junta de Compensación del PAU se comenzará a trabajar en este tema, aunque aún hay que esperar", concluyó.
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