El Poder Judicial se defiende y exige independencia

De acuerdo a un comunicado dado a conocer tras una reunión destinada analizar el tema, la entidad señaló su “extrañeza y condena por los términos impropios con los que algunos parlamentarios y autoridades estatales se han referido a uno u otro caso, pues importan faltar a reglas elementales de respeto recíproco que deben presidir las relaciones de los poderes del Estado”.

Por su parte, la Presidenta Michelle Bachelet estimó necesario que frente a estas situaciones "se tomen las medidas precautorias necesarias y se den las sanciones a los culpables. La gente es la que tiene que estar en la mira de la justicia, es decir, lo más importante es que las víctimas sean las que hay que relevar y que la gente pueda tener la seguridad que todos necesitamos".

La mandataria aseguró que "no hay interferencia" con la labor del Poder Judicial y enfatizó que el objetivo de la Reforma Procesal Penal era agilizar el sistema y que "esto no se está cumpliendo y yo creo entender muy fuertemente la sensación de las víctimas de la delincuencia".

Paralelamente, los ministros consideraron que la solicitud presentada por varios diputados para anular la tramitación de un recurso de protección en su contra por estas materias en la Corte de Apelaciones de Valparaíso, desconoce el principio de independencia judicial.

Esto, dice el Pleno, “es la base esencial del régimen de Estado de Derecho democrático y hace que el ejercicio de la jurisdicción se lleve a cabo libre no sólo de intromisiones e influencias externas al Poder Judicial, sino también de presiones o interferencias de otros Tribunales distintos al que conoce de la causa”.

Si bien diversos sectores han cuestionado la gestión en algunos tribunales, los medios de comunicación han interpretado que la molestia de los jueces apuntan en especial al presidente y senador de la UDI, Hernán Larraín, quien acusó a algunos de estos de constituir "un peligro para la sociedad" al no ser más estrictos con el otorgamiento de medidas en beneficio de los delincuentes.

El senador derechista se reunió con el presidente de la Corte Suprema, Enrique Tapia, con el ánimo de “bajar la presión” de la polémica. Sin embargo, no hubo síntomas de que menguara la fuerza de sus dichos. “Esperamos una rápida actuación, señales públicas, claras y precisas”, dijo el dirigente de la UDI al abandonar el despacho de Tapia.