El próximo 26 de julio comenzará el plazo para solicitar las ayudas del Gobierno de Castilla-La Mancha a los viudos con pensiones de hasta 7.200 euros anuales, que recibirán a partir de otoño una subvención de 400, 600, 800 o 1.000 euros, según el tramo de ingresos de cada caso, y a las que se podrán acoger el 90% de estas pensiones. Además, antes de fin de año se establecerá una nueva ayuda para los pensionistas con pensiones más bajas.
Así lo indicó el consejero de Bienestar Social, Tomás Mañas en la rueda de prensa junto al vicepresidente primero y portavoz, Fernando Lamata para dar cuenta de los acuerdos del primer Consejo de Gobierno, donde destacó que son 91.687 las personas que reciben pensiones totales, de las que 81.184 pensiones podrán acceder a estas ayudas del Gobierno de Castilla-La Mancha, cerca del 90 por ciento del colectivo.
En concreto, se han establecido cuatro tramos para establecer las cuantías. Así, explicó, las pensiones que no superen los 4.760 euros de ingresos recibirán una ayuda de 1.000 euros; los que estén entre 4.760 y 5.200 euros recibirán 800 euros; los que se sitúen entre 5.200 y 6.500 recibirán 600 euros, y los que tengan entre 6.500 y 7.200 euros de ingresos tendrán una ayuda de 400 euros.
Requisitos a cumplir
Los requisitos a cumplir el solicitante para acceder a la ayuda, indicó, serán los de mantener con sus únicos ingresos los gastos del hogar habitual, y no contar con ingresos superiores a 7.200 euros anuales, unos 600 euros al mes. Todo, sin computar como ingresos las ayudas por necesidad de tercera persona, las de la Ley de Dependencia, las dedicadas a familias numerosas de la región, las pensiones de orfandad de los hijos, y hasta 1.000 euros en el caso de rendimiento de capital mobiliario.
Será necesario, para obtener esta paga, residir en Castilla-La Mancha con dos años de antelación inmediatamente anteriores a la petición o ser emigrante retornado, además de no ser usuario de un servicio de acogimiento residencial permanente en una plaza pública o financiada con fondos públicos.
De las ayudas podrán ser beneficiarios además del cónyuge superviviente, las personas con análoga relación de afectividad a la conyugal y familiares con parentesco por consanguinidad hasta el segundo grado con la persona fallecida con la que conviviera y de la que dependiera económicamente.
En concreto, en el supuesto de familiares, deben contar con una edad igual o superior a 50 años o tener un grado de minusvalía igual o superior al 65 por ciento; y deben haber convivido con el fallecido y a sus expensas, al menos dos años inmediatamente anteriores al fallecimiento.
Las ayudas, de las que se está ultimando el modelo de solicitud y que comenzarán a abonarse en otoño, se otorgan en régimen de concesión directa, puesto que el beneficiario lo es por el hecho de concurrir estas características concretas. Asimismo, los expedientes se resolverán por parte de las delegaciones provinciales en el plazo de tres meses desde la entrada de la solicitud en el registro.
Entrada en vigor
El Decreto que incluye estas ayudas se publicará en el Documento Oficial de Castilla-La Mancha el próximo viernes, y entrará en vigor 20 días después, con lo que será el 26 de julio cuando los beneficiarios podrán iniciar el proceso de solicitud de las ayudas.
Todos los que estén en esta situación, explicó el consejero, podrán dirigirse a las delegaciones provinciales de la Consejería, los centros de servicios sociales, la web de la Junta 'www.jccm.es', e incluso a los trabajadores sociales para que den toda la información y que en otoño puedan comenzar a recibir las ayudas, que se ingresarán también en primavera, con lo que son bianuales.
Esta es, a juicio de Mañas, la "mejor manera de acabar con las situaciones de desigualdad" y que las personas que "peor lo pasan" reciban el apoyo y la ayuda de "toda la sociedad". Algo en lo que coincidió el portavoz regional, Fernando Lamata, que recordó que fue el primer compromiso del presidente regional, José María Barreda en su Debate de Investidura e insistió en que es algo que se puede hacer porque hay una situación económica "buena", declaró.
Las pensiones más bajas
Mañas recalcó que en el caso de las ayudas para mejorar las prestaciones básicas de los pensionistas con pensiones más bajas, que se espera establecer antes de fin de año, podrán ser beneficiarios los que tengan pensiones no contributivas, tengan una pensión de la Ley de Integración Social de Minusválidos (LISMI) o las pensiones de jubilación de empleadas de hogar, entre otras.
Por último, el consejero de Bienestar Social recalcó la aprobación en el Consejo del gasto de unos 14 millones de euros para el inicio de la contratación de obras para la residencia de Mora (Toledo), que tendrá 120 plazas para mayores y 40 para el centro de estancias diurnas, con lo que habrá un total de 1.200 plazas públicas para atender a los mayores en Castilla-La Mancha.
Si (
No(
