El Plan de infraestructuras 2000-2007, elaborado por el Gobierno de Aznar y más concretamente por el ministro de Fomeno Francisco Álvarez Cascos, introducía una tabla de reducción de tiempos, en cifras totales y en porcentajes, de los trayectos entre las capitales de provincia del norte y la capital de España, Madrid.
De esa comparación Santander salía muy mal parada y ese fue el motivo por el cual el documento oficial regional sobre infraestructuras, Viaria 2001-2010, presentado en su día a los medios de comunicación a bombo y platillo, no mostrara una información tan relevante para los ciudadanos.
Cantabria Confidencial ha podido comprobar que el Plan de Infraestructuras de Álvarez Cascos para el periodo 2000-2007, discriminaba a la capital cántabra de forma ostensible. El Santander-Madrid se hubiera reducido sólo un 31% (3 horas y 50 minutos de duración total del trayecto). La siguiente capital de provincia del corredor norte con menor reducción de los tiempos sería Oviedo, con un 49 % y una duración total del trayecto de 3 horas.
Lugo, que en el momento de la redacción del plan tenía una trayecto por ferrocarril hasta Madrid de 9 horas y 35 minutos, iba a quedar conectada con la capital en el mismo tiempo que Santander (3 horas y 50 minutos). La Coruña 10 minutos menos que la capital cántabra y Pontevedra diez más (aunque ambas están mucho más alejadas en kilómetros de Madrid que Santander).
Se planeaba conectar capitales como Bilbao con la capital en 2 horas y 10 minutos, con una reducción del tiempo total del trayecto de un 62%. O San Sebastián, en 2 y 15 minutos, mientras que Vitoria estaría a tan sólo 1 hora y 35 minutos de distancia.
Estaba previsto que el trayecto Madrid-Valladolid se completara en 55 minutos y es precisamente en esa actuación donde redundaba todo el beneficio para Cantabria, ya que el trayecto de Santander también veía aminorado su tiempo. Toda la reducción del trayecto Madrid-Santander se conseguía, por tanto, en el tramo Madrid-Valladolid.
VIARIA 2001-2010: Las intenciones del PP al descubierto
El documento Viaria Cantabria 2001-2010, elaborado en la última etapa de Gobierno del Partido Popular en Cantabria, demuestra que las exigencias de Ignacio Diego al actual Ejecutivo regional en materia de infraestructuras, distan mucho de las que el propio PP llegó a formular al Gobierno de Aznar entre 2000 y 2004.
Cantabria Confidencial ha podido contrasta que el PP renunciaba a pedir al Ejecutivo de Aznar la construcción de un Tren de Alta Velocidad que conectara la capital cántabra con la meseta.
En el apartado de ferrocarriles de Viaria 2001-2010, se comienza por hacer mención a las "dificultades históricas determinadas por el relieve o la lejanía de Cantabria al resto del territorio nacional", como causa de la falta de competitividad crónica del tranporte ferroviario en la región.
A continuación reconoce que todas las inversiones del Estado en la red ferroviaria de Cantabria ascendió a 9.167 millones de pesetas y se limitó "al mantenimiento de activos de la red y a la mejora de la seguridad" entre 1996 y 2000, la primera legislatura de Aznar.
Viaria 2001-2010 recoge las intenciones del Plan de Infraestructuras 2000-2007 del Ministerio de Fomento que dirigía Francisco Álvarez Cascos en la red ferroviaria Madrid-Cantabria y se limita a garantizar una inversión de 406.574 millones de pesetas entre Madrid y Valladolid/Medina del Campo, con las obras adjudicadas en los dos principales tramos -está previsto que concluya a finales de este año-.
Sin embargo se apunta de inicio, sin especificación alguna, que las inversiones previstas en Cantabria alcanzan los 46.500 millones de pesetas, aunque a renglón seguido se matiza que en el conjunto del itinerario Madrid-Santander "se supera el billón de pesetas".
A partir de Valladolid hacia el norte todas las actuaciones estaban en fase de redacción para el estudio informativo, salvo el tramo de Palencia-Alar del Rey, según el mismo documento, en fase de información pública en 2001.
Si (
No(
