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Empresas españolas quieren participar

Una central térmica despierta el interés mundial

Una central térmica despierta el interés mundial

La licitación por 500 millones de dólares para poner en marcha una central térmica a carbón en la provincia argentina de Santa Cruz despertó el interés de compañías españolas, chinas y checa. Se trata de una central ubicada en la ciudad patagónica de Río Turbio, que aportará 240 megavatios (MW) al sistema de interconexión del país suramericano.

La empresa checa Skodaexport junto con la local Roggio, la española Isolux Corsan, la venezolana Jantesa con la argentina Esuco, la china Guodian asociada con la argentina Iecsa (Grupo Socma), las españolas Initec Energía y Socoin, y la Corporación nacional china de importación y exportación de maquinaria y equipamiento (CMEC) compiten por la adjudicación.

Las firmas deberán presentar en los próximos diez días sus ofertas técnicas y económicas para que el gobierno nacional defina al ganador, que se conocerá a finales de mayo y tendrá 42 meses para poner en funcionamiento la central térmica.

El gobierno exige la participación de una empresa local que conozca la zona y el negocio energético para poder llevar adelante las obras necesarias en esta iniciativa, que fue anunciada por el Ministerio de Planificación en diciembre pasado.

La generadora será alimentada con el carbón mineral que se produce en la mina de Río Turbio, ubicada a unos 2.900 kilómetros al sur de Buenos Aires.

Argentina vivió hace casi tres años una crisis por escasez de gas que le obligó a recortar sus exportaciones y a poner en marcha un plan de inversiones en el sector de hidrocarburos y en electricidad.

En los últimos años, la demanda de energía eléctrica creció en Argentina a una tasa del siete por ciento anual, por lo que la concreción de obras para ampliar la oferta es fundamental para garantizar el abastecimiento en el mediano plazo

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