División en la clase política, sobre todo entres los dos grandes partidos, y división en la prensa. Porque un día más, los periódicos muestran su total discrepancia a la hora de calificar y analizar la jornada dura, larga y difícil de ayer lunes en el Congreso.
No defraudó a nadie. Se había levantado una gran expectación y cinco horas y media que recordaban a una jornada de las 'grandes' en la vida parlamentaria dieron para mucho. Pero el guión, el de siempre. No fue un final sorprendente ni ningún thriller:
Zapatero sólo se salió de lo habitual para pedir disculpas, tímidas y justitas, para decir que se equivocó a la hora de ser tan optimista el día 29 de diciembre, un día antes del atentado de ETA en Barajas.
Tampoco
Rajoy se salió del guión: sacudir al presidente diga lo que diga, haga lo que haga, proponga lo que proponga: la apuesta por una revisión del Pacto Antiterrorista, ya manoseada de sobra días antes en la prensa gracias a las filtraciones a mansalva, ni fue tomado en consideración. El líder del PP dijo aquello de que no querría ese pacto que no busca acabar con ETA (¿no lo busca?) y terminó haciendo explotar la traca final con la frase incendiaria
"si usted no cumple le pondrán bombas, y si no hay bombas es porque ha cedido” .
El resto de partidos brindaron, sí, de nuevo, cumpliendo con el guión esperado, un nuevo apoyo casi incondicional, sobre todo en la práctica, para el Gobierno de Zapatero. Más bien parecían la oposición de la oposición, ya que IU, PNV... se encargaron de completar el discurso del PSOE para cargar contra los 'populares' y su postura inflexible. Y a todo esto, claro, ETA frotándose las manos.
La prensa
Tanto los titulares de las portadas como los editoriales en páginas de opinión dejan clara esa postura preestablecida y sin sorpresas: He aquí los principales:
ZAPATERO DEBIO DAR MÁS EXPLICACIONES Y RAJOY RECONOCER SUS FALSAS ACUSACIONES
El atentado de Barajas con el que ETA rompió el alto el fuego es "un hecho que obliga a replantear teorías e hipótesis muy arraigadas en los partidos en materia antiterrorista, por razonables que en su momento las considerasen". "Obliga al Gobierno a explicar no sólo que su optimismo era equivocado, como hizo Zapatero, sino las razones que le llevaron a no reaccionar frente a señales obvias que contradecían ese optimismo". Y "obliga al principal partido de la oposición a reconocer que eran falsas sus acusaciones sobre las concesiones que el Gobierno ya había hecho a ETA". "No hubo ayer ni lo uno ni lo otro". "Zapatero no dio ni una explicación de lo ocurrido". "Rajoy no sólo no rectificó sus acusaciones, sino que las agravó con juicios de intenciones". "Casi lo único positivo de la jornada fue que Rajoy aceptara participar en la reunión de la comisión de seguimiento del Pacto Antiterrorista". Ayer "era una buena ocasión para explicar que era precisamente el éxito de la política de firmeza que recogía el Pacto Antiterrorista lo que permitió en 2005 explorar la posibilidad de un final pactado que evitase una sangrienta agonía de ETA y facilitase la integración de los votantes de Batasuna en el sistema democrático". "Rajoy resultó dogmático y ofensivo". "Es incomprensible lo que está pasando tras el brutal atentado del 30 de diciembre".
EL PAÍS 12. Editorial
ZAPATERO SE QUEDÓ MUY CORTO Y RAJOY SE PASÓ DE FRENADA
El debate de ayer fue "una confrontación frustrante entre Zapatero y Rajoy, que sirvió para poner de evidencia que no hay posibilidad alguna de acuerdo entre los líderes de los grandes partidos en la política antiterrorista". La intervención del presidente del Gobierno fue "vaga, abstracta, gaseosa y con muy pocas ideas, aunque imbuida de un ánimo conciliador y de un intento de acercamiento al PP". Rajoy le respondió "de forma implacable, subrayando todos sus errores y cerrando cualquier posibilidad de consenso". "Aunque se excedió en el tono, Rajoy acertó, sin embargo, en las cinco propuestas" que le formuló al Gobierno. "De poco le va a servir a Zapatero el respaldo si ETA vuelve a las andadas". "El presidente se ha equivocado de aliados y estrategia, pero Rajoy perdió ayer la ocasión de estimular el viraje de un Zapatero desconcertado por los acontecimientos". "La ocasión requería dos hombres de Estado con sentido de la medida y mientras el uno se quedó corto, el otro se pasó de frenada". "Sólo las urnas resolverán ya esta enemistad política".
EL MUNDO 3. Editorial
TRAS EL FRACASO ESTREPITOSO DE LA APUESTA DE ZAPATERO SÓLO QUEDA EL PACTO DE LAS FUERZAS DEMOCRÁTICAS
"Ayer se enfrentaron en el Congreso dos lenguajes en los que subyacen dos conceptos distintos de abordar el fin del terrorismo etarra". "El del presidente persiste en entender el tratamiento político de este fenómeno criminal como la mejor de las soluciones, en tanto que del líder del PP defiende la derrota policial y judicial de la banda". "La apuesta del presidente del Gobierno se ha mostrado fracasada casi con estrépito". Mientras que "la tesis firme y convencida del presidente del PP viene avalada por una legislatura en la que ETA quedó demediada y su brazo político, ilegalizado". "El sólido discurso de Rajoy fue una dura pero necesaria réplica a la sistemática ambigüedad de Zapatero, a ese modo retórico y vacío de reiterar conceptos de perfiles sinuosos que pueden decir una cosa y su contraria". "La esperanza sigue estando en el pacto de las fuerzas políticas democráticas para derrotar a ETA, y para hacerlo con la Policía y los jueces".
ABC 4. Editorial
Zapatero ni rectifica ni tranquiliza
El debate parlamentario "ha resultado un fiasco sin paliativos". Zapatero "no admitió más error que un exceso de optimismo el día anterior al atentado y no dio señal alguna de querer rectificar el camino". "Quienes esperaban que hiciera una solemne declaración rompiendo la negociación con los terroristas serán los primeros defraudados". "Lo mejor del discurso presidencial fue, sin duda, su final", porque concluyó con la promesa de convocar al PP y reunir a la comisión del Pacto por las libertades. La sesión de ayer "reprodujo al milímetro la fosa insalvable que separa la política de Zapatero de la del PP". "Ambos quieren que ETA desaparezca, pero el primero rechaza pagar precio político alguno; el segundo confía en la política para convencer a los etarras".
LA RAZÓN 6. Editorial
Un debate durísimo
"Poquísimas veces hasta ahora un presidente del Gobierno español había sido objeto en el Congreso de un ataque tan duro por parte de la oposición como el que ayer le lanzó el líder del PP". "Si bueno es que la oposición critique con dureza al Gobierno y le exija eficiencia y eficacia, no lo es en absoluto que el motivo sea la política contra el terrorismo, en el curso de una sesión extraordinaria, que se celebraba después del fracaso en una negociación con ETA y de un atentado por vez primera en treinta años de democracia". "Acertó plenamente ayer el portavoz del grupo catalán, J. A. Duran Lleida, que calificó de error la celebración del debate porque, según dijo, ETA no debe marcar la agenda política". Las condiciones que ayer expuso Rajoy "hacen impensable, hoy por hoy, que el PP se sume a la necesaria unidad contra ETA".
LA VANGUARDIA 22. Editorial
El PP dinamita el consenso anti-ETA
El debate de ayer "no hizo sino amplificar las rotundas diferencias entre los dos grandes partidos sobre cómo abordar la lucha antiterrorista". "Fue un despropósito si no iba a servir para lanzar un mensaje de unidad". Pero "el manifiesto interés del PP por desgastar al presidente del Gobierno, en el momento más crítico de su mandato, hizo que la batalla a brazo partido que socialistas y populares libran desde hace meses a propósito de ETA se escenificara en el hemiciclo sin que nadie moviera ni un milímetro su posición". "Zapatero tuvo el gesto de admitir su error al mostrarse inusitadamente optimista en la rueda de prensa el día anterior al atentado". "Pero un Mariano Rajoy agresivo y visceral no dio ninguna opción".
EL PERIÓDICO 12. Editorial
El consenso democrático frente al terrorismo requiere la aplicación de la legalidad por el Estado
El presidente del Gobierno y el líder de la oposición "proyectaron la misma imagen de división entre el Gobierno y el PP que la ciudadanía viene soportando frente al desafío terrorista". "Si algún déficit puede imputársele a Zapatero es el de su renuencia a expresarse de manera más explícita", y el de "su negativa a reconocer que, más allá de su desafortunada frase del 29 de diciembre -'dentro de un año estaremos mejor'- su apuesta se basaba en una apreciación poco acorde con la realidad de una banda terrorista que se aprestaba a romper el alto el fuego". Rajoy evidenció "su indisposición a acortar la distancia que le separa del Gobierno". "El consenso democrático frente al terrorismo debe procurar la unanimidad parlamentaria en defensa de la actuación de los poderes del Estado en aplicación de la legalidad vigente".
EL CORREO 29. Editorial
Si (
No(
