La campaña de la aceituna en Jaén no necesita mano de obra foránea

El Foro Provincial de la Inmigración de Jaén ha acordado para "la horquilla" del 10 al 14 de noviembre la apertura para la red de albergues para temporeros que llegan hasta en busca de un empleo durante la recogida de aceituna, cuyo "perfil ha cambiado en los últimos años" y ya no son tanto inmigrantes como personas procedentes de otras zonas de Andalucía y el país.

   Así lo ha indicado este jueves a delegada del Gobierno andaluz, Purificación Gálvez, que, junto con el director general de Políticas Migratorias de la Consejería de Justicia e Interior, Luis Vargas, ha informado sobre la reunión mantenida previamente por este organismo, del que forman parte tanto las administraciones públicas --incluidas también la estatal, provincial y las locales de los municipios que cuentan con albergues-- como organizaciones no gubernamentales, sindicatos y empresarios.

   En primer lugar, se ha referido al "cambio de perfil" al que se asiste en las últimas campañas, de modo que "son emigrantes temporeros que retornan, personas que vienen de otras provincias del Estado, más que inmigrantes". Además, ha recalcado que el "éxito de este foro es que las decisiones se toman por consenso" con el "compromiso" de sus miembros para ofrecer "una atención integral a las personas que lo necesiten".

   Al hilo, ha explicado que la red de albergues estará formada por 24 en otros tantos municipios con 771 plazas en total. Se ha acordado, "nuevamente, que sean dos noches y tres días" los que se puede permanecer en cada centro donde se dará respuesta a las "necesidades básicas". Su apertura se ha acordado "por consenso" y con flexibilidad en la "horquilla del 10 al 14 de noviembre" para ponerlos en funcionamiento en función de la situación de los respectivos municipios.
   Junto a ello, desde el Gobierno andaluz --Administración "que más financiación aporta" al operativo con unos 500.000 euros más la parte que le corresponde a Jaén de una subvención regional para políticas migratorias que asciende a un millones de euros en la comunidad-- se pone a disposición mediadores y se trabaja para garantizar la asistencia sanitaria o la escolarización y servicios complementarios como comedor a niños de familias temporeras.

NO HACE FALTA MANO DE OBRA  

En cualquier caso, el mensaje claro y rotundo es que "no hace falta mano de obra que venga de fuera" y ello "constatando datos", comenzado por el primer aforo que prevé una reducción de la producción en un 64 por ciento con respecto a la anterior hasta las 270.000 toneladas de aceite de oliva. Además, la provincia tiene "ni más ni menos" que "37.737 personas disponibles" para esta cosecha, entre los más de 12.600 parados del sector agrícola y más 18.000 trabajadores eventuales agrarios que están subsidiados.

   Por ello, ya se ha puesto en marcha una campaña publicitaria en ciudades en puntos del país donde se acaban otras campañas agrícolas para dar a conocer que "si no tienen un contrato formalizado, no vengan" y que incluye también un teléfono de información. "Lo que no queremos es que las personas vengan y se sientan frustradas en sus expectativas", ha apostillado Gálvez, para la que "sobre todas las cosas" hay que "garantizar la atención y dignidad de las personas".