Cunde el cabreo, la angustia y la desazón en los blogs extremocentristas tras el congreso valenciano del Partido Popular. Los que hasta las elecciones eran sus bastiones más aguerridos han cambiado en pocas semanas las adhesiones inquebrantables por las críticas descarnadas.
Así pasa con
Hazte Oir, organización católica ultraconservadora que ya
hoy afirma en su blog:
Se acaba un paréntesis de claridad moral en la derecha española. La etapa de José María Aznar, su acervo liberal, regeneracionista, ilustrado y modernizador, ha sido un breve sueño en una tradición errática mucho mayor. Un nuevo PP, su cuarta o quinta reencarnación, acaba de nacer. Su asimilación al Régimen es tal, que la refundación sigue fielmente el modelo de cambiazo infligido por José Luis Rodríguez Zapatero al sistema jurídico-constitucional: la traicionera vía del disimulo, los hechos consumados y la negación de los propios actos.
El neo-PP, que en rigor es un post-PP, regresa al espíritu de Alianza Popular, que es, a su vez, el de la derecha socialista de toda la vida, la que se remonta al Partido Conservador canovista del XIX. Sí, porque socialistas hay en todos los partidos, como anotó F.V. Hayek. Y en la tradición de la derecha española son particularmente abundante
La segunda voz en esta antífona la pone el propio Federico Jimenez Losantos en su blog, advirtiendo de quela égira de Rajoy no va a ser más que una estación de tránsito hacia un PP mandado por Gallardón, un mandato que durará exáctamente 15 meses.(sic)
La regencia de quince meses de Rajoy va a ser –ojalá me equivoque– una forma anélida de politiquear, es decir, una forma de hacer política al modo de la lombriz de tierra, cuya ceguera y falta de defensas provoca a veces el indulto del curioso bípedo implume, pero no de la plume rapaz, que se la lleva en el pico al nido para que la disfruten sus polluelos. Además de la vileza rajoyesca contra María San Gil, Ortega Lara o Regina Otaola, hay que consignar la trituración de la Comunidad de Madrid, que es la que más votos aporta al PP. Y encima, Mariano predica humildad. La lombriz de tierra, al menos, airea la tierra. Este la apelmaza. Por lo pelma y por terroso y polvoriento.
Y no está solo, otros eximios comentaristas con blog en Libertad Digital se despachan con frases gruesas contra Rajoy y su elección:
El ganador de este Congreso ha sido Rajoy. El perdedor, obviamente, ha sido el partido. La democracia. El talento político ha vuelto a brillar por su ausencia. Ha ganado la mala demagogia.
Si (
No(
