La ONU cumple 'obligada' por las circunstancias su 'amenaza'

"Hemos suspendido la distribución de toda ayuda alimentaria a los 650.000 refugiados palestinos en la franja de Gaza por culpa de la falta de carburante en las reservas de Gaza", indicó Adnan Abu Hasna, portavoz de la UNRWA.

"Los contactos continúan, pero no hemos recibido ni un solo litro de carburante de parte de Israel", criticó Hasna.

Israel rechazó rápidamente cualquier responsabilidad en la situación que vive Gaza y culpó de ella al movimiento islamista Hamas.

La ONU "no tiene más que dirigirse a Hamas y exigir la obtención de gasolina de los millones de litros almacenados del lado palestino de la frontera", respondió el portavoz del ministerio israelí de Relaciones Exteriores, Arieh Mekel.

"Hoy mismo hemos intentado abastecer directamente de carburante a la UNRWA, pero una manifestación de agricultores, apoyados por Hamas, nos lo ha impedido", añadió.

"Hamas trata probablemente de mostrar que existe una crisis humanitaria", denunció por su parte una portavoz del ejército israelí.

Israel dejó de abastecer de carburante a la franja de Gaza después de un ataque palestino, el 9 de abril, contra el paso de Nahal Oz, el único punto de entrada de combustible entre Israel y la franja de Gaza.

Israel asegura, no obstante, que los palestinos tienen las reservas llenas, con más de un millón de litros de combustible almacenados, pero que la Asociación Palestina Petrolera rechaza distribuirlo como medida de protesta por lo que consideran un abastecimiento insuficiente.

El jefe de la UNRWA en Gaza, John Ging, indicó a la AFP el miércoles que Israel se había comprometido a librar a la ONU 100.000 litros de gasoil y 20.000 litros de gasolina.

La UNRWA y el Programa Mundial de Alimentos (PMA) se encargan de distribuir la ayuda humanitaria a cerca de un millón de personas en Gaza, un territorio pobre, enclavado entre Egipto e Israel, con 1,5 millones de ciudadanos.

Gaza está acordonado desde que Hamas tomara el poder de la franja en junio de 2007 y el abastecimiento de productos de consumo está limitado desde enero pasado, como respuesta de Israel al lanzamiento de cohetes desde la franja hacia territorio israelí.

Según la ONG británica OXFAM, Israel proveía a Gaza con unos 800.000 litros de gasoil semanales antes del cierre del paso de Nahal Oz, mientras que la Asociación Palestina Petrolera reclama 400.000 litros diarios para responder a las necesidades de la población.

La ONU y las organizaciones humanitarias han denunciado que la situación en Gaza empeora día a día: algunos barrios están inundados de basura porque no hay combustible para los camiones de recogida, los hospitales están en una situación crítica y las aguas residuales se vierten directamente al mar (unos 60 millones de litros diarios).