Y al final, no se entrevistó con Herrera

No se asusten en la Junta, no hablamos del superministro José Blanco, sino del viceprimer ministro británico, Nick Clegg, el veraneante de Olmedo (Valladolid).

No sabemos si habrá sido porque no han coincidido las agendas vacacionales o porque el marido de la abogada Miriam González sólo quería descansar, lo cierto es que no ha habido ningún encuentro de alguna autoridad regional con el inglés.

Sí que nos hemos enterado que el compañero de Gobierno de David Cameron durante esa semana de descanso en Olmedo ha demostrado ser un hombre sencillo que leía todas las mañanas El Norte de Castilla.

También hemos sabido por el dueño del bar El Rincón Mudéjar –comparando la actitud de Clegg con la de algunos políticos de la Junta de Castilla y León-  que “a veces, viene uno y te monta revuelo con guardaspaldas en cada esquina. En cambio este es normal”. En otro diario, el camarero del bar de Olmedo matizaba: “Ojalá todos los políticos de este país y los concejales de este pueblo fueran como él”.

En verdad, debe ser una persona excepcional Nick Clegg porque estos comentarios los hizo el camarero que le ponía esas mañanas olmedanas el café. No obstante, el Topillo se está devanando los sesos por saber qué político de la Junta viaja con cierta periodicidad a Olmedo, consume en el Rincón del Mudéjar y realiza ese enorme despliegue de seguridad.