BP podría lograr el martes próximo la aprobación definitiva de su plan para terminar de sellar el pozo del golfo de México que ha provocado el pero vertido de la historia de Estados Unidos.
La petrolera trabaja en una última serie de pruebas y planes que, una vez reciba el visto bueno, podrían permitir el sellado definitivo del pozo Macondo en un plazo de 96 horas, es decir, para el próximo sábado.
"Vamos a acabar con el pozo. El pozo de alivio va a entrar en funcionamiento y se va a ejecutar la operación 'bottom kill'", ha declarado Thad Allen en declaraciones a los periodistas.
"Es cuestión de terminar las pruebas para que entendamos las condiciones en las que deberemos avanzar y las precauciones que deben adoptarse para mitigar el riesgo", añadió.
La última tanda de pruebas y planificación pretende lograr una predicción precisa del control de las presiones durante el proceso de 'bottom kill' con objeto de evitar que haya nuevas fugas de crudo.
Se estima que podría haber hasta 1.000 barriles de petróleo atrapados en la parte superior del pozo y que podrían salir a mar abierto.
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