Un canterano de 19 años llamado Rodrigo Ríos regaló al Sevilla el pasaporte para la Liga de Campeones de la próxima temporada gracias a un gol espectacular en el minuto 94, que sirvió para otorgar la victoria (2-3) a su equipo en la visita al estadio de los Juegos Mediterráneos de Almería.
'Rodri', como le gusta que le llamen, fue el recurso desesperado de Antonio Álvarez, que tiró del joven soriano para paliar el buen juego del Almería. El conjunto de Juanma Lillo, sin presiones ni alicientes, jugó un partido de gran nivel que a punto estuvo de dejar fuera del cuarto puesto al cuadro hispalense.
El local Juanma Ortíz estableció, tras un fuerte derechazo, el 2-2 que dejaba a los sevillistas sin 'Champions'. Era el minuto 78 y el Mallorca ya ganaba con comodidad al Espanyol. Los jugadores bermellones se frotaban las manos y tras certificar su triunfo ante los pericos se quedaron sobre el césped del Ono Son Moix para estallar de alegría.
Pero no fue así porque apareció, cuando menos se pensaba, una jugada por el costado derecho de Jesús Navas. El de Los Palacios se llevó hasta la línea de fondo una pared del malí Kanouté y sacó un centro al corazón del área. El remate no fue certero en primera instancia, pero apareció Rodri y dejó el sufrimiento aparte.
El chaval pegó tres saltos en el aire y amargó la bonita victoria del Mallorca, que acaba la temporada sin el premio que tanto había buscado tras su fortaleza como local. El dominio en su feudo --donde sólo perdió tres encuentros-- no sirvió para acceder a la máxima competición continental.
Allí estará el Sevilla, que tampoco hizo mucho por tal empresa. Los pupilos de Álvarez parecía que no tendrían problemas para acabar con su vecino, pero los de Lillo fueron un equipo aguerrido y que no iba a ofrecer concesiones. Y es que el gol tan tempranero de Kanouté (min.16) dio la sensación de que sería pan comido.
Pero relajaciones al margen, el choque ganó en frenesí. Ortiz igualó la contienda y Negredo sumó antes el segundo de los suyos antes de autoexpulsarse y quedarse sin final copera. A partir de ahí ya conocen la historia, el Sevilla llamó a un canterano para dejar al Mallorca en la cuneta, cuando no había forma más cruel.
Los goles del conjunto insular llegaron por mediación de Víctor y Mario Suárez, al comienzo y al final del choque, pero no sirvieron para acceder a 'Champions'. Un premio merecido para el trabajado Mallorca de Manzano, que --aún así-- viajará por el Viejo Continente en la Europa League orgulloso de sus hazañas.
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