Díaz Ferrán culpó del cierre de su empresa a la crisis y a la imposibilidad de encontrar financiación tanto de un comprador privado, que, según reveló, iba a inyectar 90 millones de euros un día antes de la sentencia de un juez británico como de las propias empresas del Grupo Marsans, que ya habían aportado 143 millones de euros.
Además, el co-propietario de Air Comet explicó que la aerolínea se ha visto afectada por el incumplimiento del acuerdo contraído con el Gobierno Argentino en el proceso de nacionalización de Aerolíneas Argentinas, por el que iba a recibir 200 millones de dólares. En este sentido, el presidente de la patronal anunció que presentará una demanda contra el Gobierno Argentino por incumplir el pacto.
"Surrealistas" declaraciones
La portavoz del comité de empresa de Air Comet,
Marina del Castillo, calificó de "
surrealistas" las declaraciones efectuadas la tarde de este miércoles por el presidente de la compañía y calificó la situación de la aerolínea como "
muy triste y muy fuerte".
Del Castillo puso en duda las declaraciones en las que Díaz Ferrán afirmaba "
jamás esconderse de los problemas", recordando que "
nadie supo nada" de la rueda de prensa convocada este miércoles hasta el último momento, y que los trabajadores tuvieron constancia de ella únicamente de manera indirecta.
Asimismo, del Castillo advirtió que "
la mayor parte" de los trabajadores de Air Comet no recogieron los pagarés que Díaz Ferrán señaló como necesarios para cobrar las pagas de octubre y parte de noviembre, dado que "
no formalizó el aval" y "
no querían arriesgarse".
En este sentido, apuntó que la mayoría de los que sí lo hicieron eran "
gente afín a la empresa", puesto que sabían lo que iba a ocurrir, y puso como ejemplo el hecho de que "
menos del 10%" de las azafatas recogieran los suyos.
Además, recordó la existencia de un documento firmado por Díaz Ferrán en el que se comprometía a ingresar en cuenta a los trabajadores el pago de las nóminas antes de finalizar el mes.
No dimitirá de la presidencia de la CEOE
Por su parte, Díaz Ferrán aseguró este miércoles que el cierre de la compañía no le ha restado el apoyo "
unánime" de los empresarios y aseguró que este momento "
no hay ninguna organización en la CEOE" que quiera que abandone su cargo al frente de la patronal.
"
Los que tienen que decidir si sigo como presidente de la CEOE son los empresarios", argumentó Díaz Ferrán, quien aseguró que, si los miembros de la patronal "
están a gusto" con su gestión, no se le pasa "
por la imaginación" dimitir. Además, defendió que dada la actual crisis económica "
lo raro" sería que un presidente de la CEOE, siendo empresario, no tuviera "
algún problema".
Si (
No(
